Mis comics

Aquí os iré dejando algunos de los cómics que voy leyendo cuando tengo tiempo. Para cada uno incluyo un pequeño comentario, una nota y su portada. Y ordenado como los posts en el blog: lo primero que aparece es lo último que he leído.

Tenía yo muy abandonado el mundo de los cómics en los últimos años. Había leído muy poco y de manera discontinua. Hasta que conocí a un grupo de gente a los que también les gustan mucho. Y me volví a enganchar. Gracias a Mariví, Manuel, Marian, Carlos, Ana Belén, Diana, Victoria, Chicho y Juan por esos ratos. Y sobre todo a Agustín, un auténtico crack.

- La auditora (Bilbao + Peinado) (Nota 7): partiendo de un dibujo nada estridente, pero adecuado, el guión me ha parecido muy original. Mediados del siglo XXI. De una auditora que llega a un pueblo factoría a hacer su trabajo. Pero nada es lo que parece. Corrupción, infidelidades, inteligencia artificial, todo tiene sitio en esta pequeña comunidad. Engancha.


- El mundo de Sofía. I. La filosofía desde Sócrates a Galileo (Zabus + Nicoby) (Nota 4): basado en el famoso libro del mismo título de Jostein Gaarder, es una historia de la filosofía occidental donde una adolescente, Sofía, va viajando por el tiempo y el espacio, y en muchos casos conociendo a los grandes pensadores. Y siempre acompañada por Alberto, que la guía en su aventura. Me ha parecido demasiado básico, porque en los temas que yo conocía algo se queda demasiado en la superficie y en los que no sabía nada no acabo de entenderlos en  muchas ocasiones. Eso sí, el dibujo me he gustado. La parte positiva es que me ha animado más todavía a leerme el libro, del que todo el mundo habla maravillas. Aún así me leeré el segundo tomo, que ya lo he visto en librerías.


- Elise y los nuevos partisanos (Grange + Tardi) (Nota 2): lo cogí porque el dibujo era de Tardi y al final poco más que eso. Es la historia de una militante de izquierda francesa y su lucha política desde finales de los cincuenta hasta inicios de los setenta. La independencia de Argelia, Mayo del 68 y las grandes huelgas son los principales acontecimientos. Con un guión plano y muy repetitivo, con demasiados nombres y organizaciones (a veces parece una sopa de letras), aburre. Salvo Elise, el personaje principal, y Mao, que está continuamente presente, el resto van y vienen como sombras. La portada me gusta.


- La estirpe fracasada (Elisa Riera) (Nota 6): las pequeñas historias de una familia de noble linaje venida a menos (en realidad son cuatro, pero partiendo de un origen común) a través de distintos episodios (bodas, navidades y hasta velatorios, cada uno con un color dominante). Celos, envidias, primos que se odian, adolescentes pegadas a un móvil, secretos ocultos que todos conocen y mucha hipocresía. Pero sobre todo mucho humor negro. Y un dibujo raro, que al principio hasta desagrada, pero que al final te das cuenta de que encaja perfectamente con la historia.


- Aquel verano (Jiliian Tamki y Mariko Tamaki) (Nota 5): dos chicas a punto de llegar a la adolescencia que pasan sus vacaciones desde hace muchos veranos en la misma playa. Lo que hacen, lo que hablan, sus temores, sus sueños y sus familias. Personal, creíble y con un dibujo con un cierto toque manga.


- Fatty. El primer rey rey de Hollywood (Nadar + Frey) (Nota 5): historia real de Roscoe Arbuckle, estrella del cine mudo en los años 20. Fue acusado injustamente de asesinato, y aunque finalmente fue declarado inocente, su carrera nunca volvió a ser la misma. Uno de los primeros linchamientos mediáticos de la historia. Pagó el pato de un industria del cine que quería moralizar (código Hays) más que entretener y un público ávido de escándalos. El narrador es nada menos que un Buster Keaton ya mayor. Lo mejor el dibujo.


- Bad girls (Alex de Campi + Victor Santos) (Nota 4): la Nochevieja de 1958 en el club El Edén de La Habana y tres mujeres que quieren robar una millonada y salir como sea de una Cuba que va a cambiar a Batista por Castro. Buen dibujo pero que a veces complica un poco seguir la historia.


- Crónicas de juventud (Guy Delisle) (Nota 5): álbum personal del autor donde nos cuenta sus vivencias como trabajador en una fábrica de papel (donde también lo hacía su padre) durante los veranos cuando era estudiante. Lo pillé porque el título empezaba por Crónicas y conocía al autor (pequeña broma!!!). Simplemente se deja leer.


- Ulises Don Nadie (Mordillat + Gnaedig) (Nota 6): de un actor francés que profesionalmente va de más a menos y que un día se encuentra sin trabajo y sin que nadie le ayude. Cuando ya no sabe qué hacer, un antiguo compañero le echa un cable y le ofrece incorporarse al Partido Fascista Francés. Y de todo lo que pasa después. Con ese dibujo línea clara que tanto me gusta.


- Baños Pleamar (Isaac Sánchez) (Nota 5): sobre una especie de chiringuito/restaurante/vivienda playera en la Badalona de los noventa. La historia de la familia del autor, entonces un niño y vista a través de sus ojos. Un poco irregular para mi gusto, pero se deja leer. La portada me gusta.


- Soy la Malinche (Alicia Jaraba) (Nota 6): la historia de la intérprete y consejera de Hernán Cortés, el conquistador del imperio azteca. El argumento se centra más en la parte personal y está muy bien desarrollado. Y con un dibujo de esos que me gustan a mí. No muy conocida aquí en España, sería curioso saber la reacción de los mejicanos ante un cómic sobre un personaje tan controvertido para ellos.


- Dragones de frontera (Harriet + Gil + Garluk) (Nota 5): el argumento prometía (Nuevo México a finales del siglo XVIII, caballería española y luchas con indios) y el formato también (edición grande y cuidada, buen dibujo). Pero luego uno lo lee y es menos de lo que parecía (todo es cuestión de expectativas), pero con un nivel más que correcto. A la historia le falta algo que no sé qué es y el dibujo da la sensación de estático cuando todo lo que sucede es muy dinámico.


- Boomers (Bartolomé Seguí) (Nota 6): lo he leído y me ha gustado. Pero luego hice algo que no suelo hacer: buscar algunas críticas. Y no son especialmente buenas. Porque el lector influye en la opinión de la obra. Y puedo entender que a una persona que no sea un "boomer" (como soy yo, o al menos eso dicen mis hijos) las conversaciones y pensamientos que hay en el cómic le parezcan intrascendentes y estereotipadas. Porque a mi me lo hubieran parecido hace unos años. Pero ahora empiezo a entender algunas de ellas. Habrá que releerlo en unos años para ver qué pasa. Eso sí, un dibujo espectacular para una edición magnífica.


- La revolución rusa contada para escépticos (Martín Pardo) (Nota 5): llevaba años pendiente de leer el libro de Juan Eslava Galán en el que se basa este cómic, pero nada, que no había manera. Así que cuando lo vi en la Casa del Libro (me llamó la atención esa portada tan "soviética"), empecé a hojearlo, y como tenía buena pinta, lo compré. Con una edición físicamente estupenda (con ese olor de los cómics que me encanta y que no tiene nada que ver con el de los libros) y un dibujo que se queda en correcto, la historia está contada de forma un poco irregular y creo que se deja muchas cosas por el camino. Y le falta algo de ese toque "Eslava Galán" que tienen todas las obras de su serie "contada para escépticos". Perfecto para iniciarse en el tema, me parece que tendré que leer el libro original para conocer más sobre uno de los acontecimientos más relevantes del siglo XX.


- The mansions of the gods (Goscinny + Uderzo) (Nota 7): vuelvo con Astérix y en concreto con el primer álbum que compré (en Irlanda, en un formato muy pequeño y que veo ahora que me costó 95 peniques!!!), pero que de pequeño leí muchas veces en casa de un amigo. Que esta vez César decide que la mejor manera de expulsar a los galos de su aldea es construir a su lado una ciudad moderna con todos los lujos asociados. Siempre me encantó el folleto de la promoción, así que os lo dejo debajo de la portada. Peleas con los romanos, rebeliones de esclavos y como no, banquete final. Creo que hasta se hizo una película.



- CIMOC Especial 3a Guerra Mundial (Nota 5): editado en 1982, andaba durmiendo el sueño de los justos en una caja junto con más cómics de la época. Me acordaba de la portada y por eso lo cogí. Escrito y dibujado en un mundo todavía dominado por la Guerra Fría, cuarenta años después rezuma ingenuidad. Pero aunque solamente por la portada de Vicente Segrelles ya merece la pena. Nostalgia.


- Patria (Toni Fejzula + Fernando Aramburu) (Nota 7): me lo dejó un amigo hace casi un año y hasta hoy, una primera mañana lluviosa de finales de verano no me he puesto en serio a leerlo. Ya reseñé la novela y la serie, y el cómic también me ha gustado. Y me ha vuelto a dejar esa sensación de tristeza. Quizás por ello me ha costado tanto ponerme. Pero una vez que lo haces, se lee de un tirón, aunque a veces cuesta, por la historia en sí, que te hace reflexionar sobre las miserias (y a veces, grandezas) del ser humano. Veo lo que sucede hoy en día y hay cosas que no entiendo.


- Asterix y los pictos (Ferri + Conrad) (Nota 4): último álbum de la nueva pareja que sustituyó a Uderzo y Goscinny. Resumiendo en dos palabras: absolutamente previsible. Así que solo para incondicionales como yo.


- Thoreau. La vida sublime (Dan + Le Roy) (Nota 3): biografía del padre de la desobediencia civil, filósofo libertario que vivió en los Estados Unidos previos a la Guerra de Secesión. Sus ideas inspiraron a Gandhi o Luther King, entre otros. El dibujo no me ha acabado de convencer y la historia se queda un poco en la superficie de este abolicionista y amante de la naturaleza que es mucho más de lo que se muestra en esta obra.


- Historia del arte en cómic. El mundo clásico (Pedro Cifuentes) (Nota 6): se juntaron dos cosas: que me gustan los cómics y que no tengo mucha idea de arte. Y cuando vi que el autor era un profesor de secundaria, pues se alinearon todos los astros. El caso es que este tipo se coge a algunos de sus alumnos y a su perro y se los lleva, viajando en el tiempo y en el espacio, a conocer el mundo clásico. Y entre él y algunos personajes que aparecen (Heródoto o Hipatia de Alejandría, por ejemplo) les va explicando cosas de arte. Dibujo decente, historia con toques de humor, más enfocado a chicos de la ESO que a adultos, a mí me ha encantado y tengo que reconocer que he aprendido. En estos momentos también están editados un volumen dedicado a la Edad Media y otro al Renacimiento. Me pondré con ellos, lo tengo claro.


- La balada del norte. Tomo 4 (Alfonso Zapico) (Nota 7): volumen final de la serie (casi mil páginas) y recién publicada (con ganas he estado esperando), los otros tres están reseñados por ahí abajo. Una especie de historia gráfica sobre la revolución de Asturias de 1934. Se cierran todas las líneas argumentales. Una gran obra que inicialmente solo se concibió para dos partes, pero que ha llegado (y de manera excelente) hasta aquí, y que nos habla de un pasaje de nuestra historia menos conocido que otros y que normalmente se trata de manera bastante sectaria (gloriosa para unos y odiosa para otros).


- Asterix in Britain (Uderzo + Goscinny) (Nota 7): uno de mis álbumes favoritos de la colección, quizás porque fue de los primeros que compré, allá en Dublín en los primeros ochenta. Porque lo he vuelto a leer en inglés y es que hay expresiones, que aún siendo el original en francés, están perfectamente adaptadas. Una historia muy bien contada donde además de lo clásico de Asterix (los piratas, la pasión de Obelix por los cascos romanos o el banquete final) aparecen los Beatles (unos bardos, claro) o la Torre de Londres y nos hablan de la invención del té como bebida nacional. Lo mejor para mí, el partido de rugby.


- Tintín en América (Hergé) (Nota 5): hacía años que no leía nada de Tintín y me ha resultado raro, cuando menos. El dibujo me sigue gustando pero la historia me ha parecido bastante sosa y hasta ingenua, llena de tópicos sobre la sociedad americana de los años treinta. Potencial candidata a ser cancelada en estos tiempos que corren por los protectores de los lectores. Tendré que leer otro en las próximas semanas para ver si me quita el regusto que me ha dejado.


- Chez Adolf (Rodolphe + Marcos + Fogolin) (Nota 8): tomo recién editado en España y que comprende los dos primeros álbumes (1933 y 1939). De los cambios que se van produciendo en Alemania desde 1933, contado a través de las vidas de los clientes y vecinos de la taberna Chez Adolf. Una buena historia con un dibujo más que excelente que nos muestra como día a día cosas impensables pueden ir sucediendo delante de nuestras narices sin que hagamos nada. Esperando con ganas la traducción del francés del tercer volumen de la serie (1943).


- La sombra del águila (Rubén del Rincón) (Nota 7): basado en, para mí, uno de los mejores libros de Pérez-Reverte, en cuanto descubrí que había salido una versión en comic la compré, aunque luego he tardado un poco en leerlo. Y no decepciona. De unos soldados españoles que acompañan a Napoleón en la campaña rusa. Y de su "heroísmo". Una historia divertida con un excelente dibujo y una encuadernación que no desentona.


- Miguel Hernández. Piedra viva (López-Cabrera + Armengol) (Nota 3): biografía más política que literaria del famoso poeta español que vivió durante la primera mitad del siglo XX. Me ha servido para aprender bastante sobre su vida, en especial sobre su participación en la guerra civil. Y un hecho que desconocía y que me ha llamado la atención: su mala relación con García Lorca (y que era debida, según el cómic, a los celos de este último). La historia funciona a trozos y el dibujo bastante flojo para mi gusto.


- Obelix and Co. (Goscinny + Uderzo) (Nota 7): vuelvo a leerlo después de muchos años a raíz de su aparición en el podcast Kapital de Joan Tobau. Un manual de economía básico a la vez que breve y que tiene como protagonistas a nuestros irreductibles galos. Y también un excelente cómic, en su formato clásico de 48 páginas que, como no, acaban con el tradicional banquete.


- La obsolescencia programada de nuestros sentimientos (Zidrou + De Jongh) (Nota 6): la madre de Mediterránea muere y ella, quesera, se convierte en la mayor de su familia. A Ulises, un viudo de 59 años con hijos ya mayores, le prejubilan de la empresa de mudanzas donde ha trabajado siempre. Se conocen y entonces les empiezan a suceder muchas cosas, algunas por primera vez en su vida.


- The beauty (Haun + Hurley) (Nota 5): una epidemia donde el que se contagia adelgaza, se pone cachas y guapo. Aunque en dos años te explota la cabeza. De gente que se quiere contagiar, de cómo los gobiernos y las farmacéuticas se aprovechan de la situación (las vacunas, te suena todo esto?). Lo curioso es que la serie (más de 600 páginas) está escrita antes de la pandemia. Para que luego digan que la gente no tiene imaginación. Irregular tanto en el dibujo (hay muchos dibujantes distintos) como en el guión, tiene un final precipitado en el que no se cierran bien los distintos hilos argumentales.


- La misión de Alou. Una maternidad roja (Christian Lax) (Nota 6): con uno de los mejores dibujos de los que he disfrutado últimamente, el cómic nos cuenta la historia de una estatuilla de madera del siglo X que viaja con Alou desde Mali al Louvre para reunirse con otra expoliada antes de la independencia del país en los sesenta. De pasión por el arte, islamistas radicales, corrupción o racismo, pero sobre todo de lo que una persona es capaz de hacer cuando tiene un objetivo.


- Cinco años (Terry Moore) (Nota 4): lo elegí por las portadas (en color) y resulta que luego es en blanco y negro. Curiosa historia de espías (que no espíos, porque todas las protagonistas son mujeres) sobre una bomba que puede acabar con el universo y claro, hay que evitarlo. Los malos, que quede claro, en este caso son los rusos. Guión normalito que deja demasiados cabos sueltos. Pero se lee en una tarde.


- WW2.2 La otra guerra mundial (Varios) (Nota 6): Hitler es asesinado en 1939, poco después de la invasión de Polonia y Goering asume el mando. Este es el planteamiento inicial de una serie de siete álbumes en las que en cada uno de ellos se desarrolla un episodio ficticio. Desde la batalla de París al Pacifico o el frente ruso, pasando por la invasión de Gibraltar (con presencia estelar de la Legión!!!). Irregular como era de esperar en una obra de estas características, el nivel medio es bueno en las casi 500 páginas que la forman.


- De perros y de huesos (Colo) (Nota 7): historia ambientada en los bajos fondos del Madrid actual, donde delincuentes de tres al cuarto, policías, padres, yonquis, mafiosos y hasta algún pintor van apareciendo (y algunos también desapareciendo). Un dibujo oscuro y original que complementa perfectamente un guión contundente.


- Chico & Rita (Javier Mariscal + Fernando Trueba) (Nota 7): lo primero que llama la atención es el dibujo, que transmite sobre todo sensualidad y ritmo, pero también celos, frío o violencia. Y después la historia de amor, en La Habana y el Nueva York de los últimos cuarenta y primeros cincuenta. David Trueba hizo posteriormente una película de animación basada en el cómic.


- The end of the fucking world (Forsman) (Nota 3): las andanzas de dos adolescentes americanos, Alyssa y James, me han dejado un poco frío. Posteriormente se adaptó para Netflix. Flojito.


- Jane, el zorro y yo (Arsenault + Britt) (Nota 5): relato intimista sobre una niña canadiense que piensa que está gorda, que lee Jane Eyre, todavía sin amigas, que se encuentra un zorro en un campamento de inglés y que tiene una madre que la quiere mucho y dos hermanos a los que les gusta The Police.


- Dédalo e Ícaro. La sabiduría de los mitos (Bruneau + Pellegrini) (Nota 4): uno de los episodios (como La Iliada o La Odisea) de la colección de Luc Ferry. En este nos cuenta la historia del minotauro de Creta y la de Ícaro. Todo muy corrientito, tanto el dibujo como el guión.


- Todo el polvo del camino (Antunes + Jaime Martín) (Nota 6): de un hombre que ha perdido todo durante la Gran Depresión y en busca de no sabe qué. Una historia sobre la injusticia, la solidaridad, el racismo, los buenos padres, la avaricia y la bondad. Y con un libro de Jack London. Uno de mis favoritos, Jaime Martín, pero esta vez solo como dibujante. El guión un poco irregular para mi gusto.


- La primavera de los árabes (Filiu + Pomès) (Nota 3): relato de todas las luchas que se dieron en el mundo árabe hace diez años. El problema es que son muchas y uno se acaba perdiendo entre tanto nombre y hecho, la mayoría desconocidos. Y el ritmo no ayuda, se acaba haciendo pesado.


- Los enciclopedistas (Pérez Ledo + Orbe) (Nota 5): en el París de mediados del siglo XVIII un grupo de intelectuales está preparando La Enciclopedia. Pero eso no le gusta ni al Rey ni a los Cruzados. Y de repente empiezan a asesinarlos. Pero no cuentan con el temple de Diderot...o de Marie.


- Duke 3 (Herman + Yves) (Nota 6): tercera entrega de este western que sigue las aventuras (y sobre todo desventuras del señor Finch). Ahí siguen los personajes de los dos primeros álbumes y me acabo de enterar de que hay otros dos por ahí. Empiezo a buscarlos.


- Marea baja (Pecqueur + Gibrat) (Nota 3): lo leí porque me encanta el dibujo de Gibrat (aunque no tanto sus guiones, que en este caso no es suyo), pero la historia es muy rara (otros dirían demasiado original) y con poco sentido. De un tsunami, un mono, una sirena y la muerte (con su guadaña y todo).


- El arte de la guerra (Roman + DeWeese) (Nota 2): adaptación muy libre del clásico homónimo de Sun Tzu con curioso formato: blanco y negro para la historia y rojo para las citas de libro original y la sangre, que hay mucha. Pero el invento no funciona, no te enteras de nada y además se hace eterno. Una tarde perdida.


- The good, the bad and the ugly (Dixons + Polls) (Nota 5): lo bajé pensando en que era la versión en cómic de la famosa película de Sergio Leone, pero lo único que tiene en común, aparte de que es un western con una estética parecida, es el personaje del cazarrecompensas interpretado por Clint Eastwood. Historias con mejicanos, apaches, franceses y siempre con oro o dólares por medio. No sale vivo ni el apuntador.


- Las guerras silenciosas (Jaime Martín) (Nota 7): vuelve por aquí otro de mis autores favoritos. Esta vez para completarla trilogía sobre su familia. Cronológicamente es la segunda, y cuenta el servicio militar que hizo su padre en Sidi Fini en los sesenta. Describe muy bien lo que era el ejército (y la sociedad española) en aquellos tiempos. Y siempre con ese toque duro y esos momentos más personales a los que nos tiene acostumbrados el autor.


- Shanghai dream (Thirault + Miguel) (Nota 5): la historia de un director y una guionista, ambos judíos, y su sueño de rodar su película. De su huida de la Alemania nazi al Shanghai controlado por los japoneses. La idea es buena y a ratos convincente, pero no acaba de despegar. Y los personajes son demasiado planos. Entretiene pero no llega.


- Vanikoro (Patrick Prugne) (Nota 5): de una expedición francesa de dos fragatas, justo antes de su Revolución y que naufraga en una isla remota del Pacífico. Repleta de unos nativos que no son muy amistosos. Recreación de un hecho histórico con un buen dibujo, pero con un guión que no acaba de cuajar.


- Howard P. Lovecraft. El escritor de las tinieblas (Nikolavitch  + Gervasio) (Nota 4): la verdad es que no tengo claro porqué empecé a leerlo. Simplemente me sonaba, pero no había leído nada suyo. Parece que fue una persona compleja, distinta y con muy buenos amigos. Y según dicen, un excelente escritor. Pero en cuanto al cómic, la historia va a tirones, el dibujo es muy rígido y acartonado y los personajes apenas se quedan en la superficie.


- El ejército de la sombra (Olivier Speltens) (Nota 6): la historia de un grupo de soldados alemanes en el frente oriental, desde la batalla de Kursk en el verano del 42 hasta la caída de Alemania en la primavera del 45. Dibujo impecable, guión más que correcto, unos personajes muy creíbles y un frío que se siente desde la primera página. Un cómic sobre guerra que se desarrolla sobre todo en Ucrania y leído justo estos días. Eso sí, con una última página que no me ha convencido del todo.


- Los mundos de Aldebarán - Regreso a Aldebarán (Leo) (Nota 4): en esta quinta parte (y última publicada hasta el momento) se juntan todos los personajes de las anteriores, aunque la voz cantante la llevan, como no, Kim y Manon. Intenta cerrar todas las líneas argumentales abiertas durante los ciclos anteriores, con resultado irregular. Y al final, después de más de mil paginas, la historia se agota.


- Llegará el invierno (López + Gálvez) (Nota 7): con un dibujo distinto y con uno de los personajes que me recuerda a Vázquez Montalbán, es la historia de unos viejos amigos con pasado revolucionario que se van haciendo mayores. Y uno de ellos se ha metido en un lío. Una novela negra (o de amor, o de amistad, que no lo tengo claro) donde los clubes de alterne son protagonistas y que se desarrolla en la Gerona actual.


- Los mundos de Aldebarán - Supervivientes (Leo) (Nota 5): en la cuarta parte de la serie, nuevos protagonistas (son doce, pero al final solo quedan siete), aunque los de verdad son Alex y Manon. Y un Sven que vuelve a aparecer. Guión un poco más flojo que empieza a ser repetitivo. Y lo de las escenas de sexo sin venir a cuento cansa ya un poco.


- Maestra de pueblo. Con L de novata (Ilustraciones de Cristina Picazo) (Nota 5): la famosa influencer se estrena en el mundo del cómic contándonos su primer curso como maestra. Visita todos los lugares comunes, nada nuevo, pero el relato es fresco y se lee en un rato. Genial lo de los tipos de padres.


- Los mundos de Aldebarán - Antares (Leo) (Nota 6): en este tercer ciclo de la serie nuestros amigos viajan a un nuevo planeta (adivinas el nombre?) y resulta que ahora se llama matriz. Mai Lan cobra más protagonismo, hacen su entrada Lynn y los hermanos Thornton y reaparece Sven. Y los tres clásicos siguen ahí.


- Magallanes. Hasta el fin del mundo (Clot + Verguet + Orenge) (Nota 3): el relato de la primera vuelta al mundo realizada por Elcano. Dibujo corrientito, guión con poco ritmo y entre los dos me he tirado todo la obra intentando identificar a los personajes y saber qué estaban haciendo. Una oportunidad perdida de hacer un buen cómic sobre un acontecimiento tan importante.


- Los mundos de Aldebarán - Bételgeuse (Leo) (Nota 6): segundo ciclo de la serie, en esta ocasion Kim viaja al planeta Bételgeuse donde contacta con otra mantriz.  Aunque este planeta guarda más sorpresas. Aparecen Inge y Héctor y siguen Marc, Alexa y Pad.


- Blue Note (Mariolle + Bourgouin) (Nota 6): dos historias que solo se cruzan, y muy brevemente, al final, pero que van en paralelo todo el tiempo. La primera, la de un boxeador que ha tenido mejores tiempos y la segunda, la de un joven guitarrista de blues que acaba de llegar a Nueva York. En un mundo de clubes musicales, de mafiosos y de garitos de mala muerte cuando solo faltan dos semanas para que acabe la Ley Seca.


- Los mundos de Aldebarán - Aldebarán (Leo) (Nota 6): primer ciclo de una serie de cinco. Más de 250 páginas sobre una colonia terrestre que ha perdido el contacto y donde pasan cosas muy raras. Porque todo parece muy idílico, pero el ser humano es como es. Kim, Marc y la mantriz.


- Siempre tendremos 20 años (Jaime Martín) (Nota 6): una especie de continuación de "Jamás tendré 20 años", situada en la guerra civil y protagonizada por los abuelos del autor. En esta ocasión la acción se centra en la vida de Jaime Martín (nacido en 1966) y de su generación, y está ambientada principalmente en la Barcelona de la periferia de los años 80. No tiene la frescura de "Sangre de barrio", pero técnicamente es superior.


- I will judge by your bookshelf (Grant Snider) (Nota 7): obra que recopila mucha de las tiras que el autor publica periódicamente en la red y que más de una vez he compartido en redes sociales. Con un dibujo que me encanta, con ese toque personal que siempre me llega, comparto con Grant Snider la pasión por los libros, no solo para su lectura sino como elemento estético (pocas cosas me gustan más que verlos colocados en estanterías).


- Leonardo da Vinci. El renacimiento del mundo (Kahil + Vittori) (Nota 1): mira que el personaje me interesa, pero es que el cómic no hay por donde cogerlo: historia sin ritmo, personajes planos y un dibujo insulso. Y paro ya con la reseña que bastante tiempo he perdido ya leyéndolo.


- 1984 La novela gráfica (Fido Nesti) (Nota 8): adaptación del famoso libro de George Orwell, uno de los pocos que he leído varias veces, esta vez en formato cómic. Y cada vez que lo leo me gusta más y me da más miedo. Porque nuestra sociedad, en lo que se refiere a la información que tienen de nosotros, se parece cada vez más a la descrita en la obra. Con el agravante de que la mayor parte la hemos cedido voluntariamente, ya sea a empresas o gobiernos. Nos acabaremos arrepintiendo? Con un dibujo oscuro, una estética (esas caras!!!) y unos trazos que encajan perfectamente con la historia. Una obra densa, que lleva tiempo y esfuerzo, pero que todo el mundo debería leer.


-  La balada del Norte (Tomo 3) (Alfonso Zapico) (Nota 7): aunque he aprovechado para releer los tomos 1 y 2 (la reseña está por ahí abajo), en este se sigue con la Revolución de Asturias del 34, pero desde que interviene el ejército y empieza la represión una vez desarticulado el levantamiento obrero. Con los mismos protagonistas y con un estilo donde le da todavía más importancia al dibujo frente al texto, la calidad se mantiene. Queda una cuarta y ultima parte todavía no publicada y que habrá que leer.


- Lo que nunca te contaron sobre el dinero (Igor) (Nota 1): me llamó la atención por ser un cómic. Pero poco más. El contenido es una una ristra de obviedades, la mayoría erróneas, desordenadas y con poca gracia. En resumen, un libro al que no hay que dedicar ni un minuto de tu tiempo (ni un euro de tu dinero, que ya lo he hecho yo, tonto que es uno!!!). Y que conste que no le pongo un cero porque el dibujo por lo menos se queda en pasable, que si no...


- El invierno del dibujante (Paco Roca) (Nota 7): relectura de una de las obras ya clásicas de Paco Roca, sobre la "rebelión" de cinco de los mejores dibujantes de la mítica editorial Bruguera para crear su propia revista. Ambientada en la Barcelona de finales de los cincuenta y usando como línea argumental esa historia, refleja perfectamente como era tanto el mundillo editorial como la sociedad española de la época. Una edición especial con unos extras muy interesantes.


- La bestia (Chabouté) (Nota 6): un dibujo que da frío. Lobos. Nieve. Un asesinato. Nieve. Otro asesinato. De un inspector en un pueblo aislado por la nieve. Un asesinato más. Nieve. Una vieja historia. Nieve...


- Mala estrella (Barbara Baldi) (Nota 6): un dibujo que cautiva desde la primera página. Inglaterra a mediados del siglo XIX. De una abuela, aristócrata ella, y de una herencia que separa a sus dos nietas, sus herederas. Una historia de celos, avaricia, prejuicios sociales pero también de lucha, tristeza y amor por la música.


- Vacaciones (Micoby) (Nota 6): viejos recuerdos de un verano en un camping de playa. Cinco adolescentes, dos chicas, tres chicos. Muchas primeras veces y una sola última. Un relato que te hace recordar momentos y sensaciones del pasado.


- El abrigo de la corona (Sierra + Sánchez) (Nota 3): de las luchas entre el poder real y la orden de Calatrava en el Ciudad Real del siglo XIII y como afectan a la vida de la familia de un alarife de la ciudad. Con un guión a veces irregular y un dibujo correcto, se deja leer. Interesante solo si eres culipardo o churriego (o sea, si entiendes lo que significan estas dos palabras).


- Spirou. El botones de verde caqui (Schwartz + Yann) (Nota 6): conocía obviamente a Spirou pero no me había llamado la atención, así que, aunque parezca raro, nunca había leído nada suyo. Y mi primer contacto ha sido con una serie especial donde se encargan del personajes grandes autores del cómic, en este caso los mencionados Schwartz y Yann. La historia está ambientada en la Bruselas ocupada por los alemanes de 1942 y entretiene, aunque probablemente me he perdido muchas cosas al no conocer previamente a los personajes y su entorno. El dibujo excelente, ese estilo franco-belga de línea clara que siempre me ha gustado. Tendré que ponerme a leer más álbumes, que los hay y muchos (solo de la serie regular hay más de cincuenta!!!).


- Hernán Pérez del Pulgar. El de las hazañas (García + Castro) (Nota 4): la historia del héroe de Ciudad Real, desde su nacimiento en la ciudad hasta su entierro en Granada, contada por etapas y por distintas personas. Con cameos de personajes históricos como Fernando el Católico, Boabdil o el Gran Capitán. Guión correcto y un dibujo al que le falta un poco de dinamismo para mi gusto.


-En soledad (Chabouté) (Nota 6): el silencio. Blanco y negro. Un faro. Muchas palabras. Dos pescadores y el hijo del farero. Dos cajas de cartón. Casi 400 páginas. Un diccionario. Un pez. Gaviotas. Un viaje semanal en barco. Y la soledad.


- Reencuentro en Cliff Island (Barranger + Bernatets) (Nota 1): vaya racha que llevo. De uno que ha triunfado en la vida (si por eso se entiende tener mucho dinero, claro, porque en el resto, el hombre, como el cómic, da pena) y que invita a sus antiguos compañeros de instituto  (gracias a Dios no van la mayoría) a pasar unos días en su isla privadada. Historia penosa, personajes infames, solo se salva (es domingo y estoy de buen humor) un dibujo poco menos que pasable.


- La Cruz de los casados (Sierra + Sobrino) (Nota 2): la historia de amor de Blanca y Sancho, familias enfrentadas de ciudades distintas. Nada nuevo salvo porque está ambientada en el siglo XIV en Ciudad Real y Miguelturra. Y porque el título hace referencia a unos de los iconos de la capital. Para leer solo si eres de aquí.


- Regreso al Edén (Paco Roca) (Nota 7): recién publicado, tenía ganas de leer lo último de mi admirado Paco Roca. Un retrato, desde el punto de vista de Antonia y a través su familia, de la España de finales de los cuarenta. Irregular. Con partes brillantes y un dibujo que no decepciona en ningún momento, en otras abusa de los tópicos más rancios y hasta de un cierto sectarismo que no tiene mucho que ver con la historia que cuenta. Me gusta el formato apaisado que ya utilizó en "La casa".


- Rebelión en la granja (Bernardi Odyr) (Nota 7): adaptación de la famosa obra de George Orwell, una de las que probablemente me he leído más veces desde los lejanos tiempos de la adolescencia. Un alegato contra los totalitarismos, en este caso sobre el comunismo. Con un buen dibujo, el guión recoge perfectamente tanto la historia como el espíritu del libro. Mi recomendación sería leer primero este último, con más jugo y matices y posteriormente el cómic. Pero empezar por éste último tampoco sería un mal comienzo. Lo importante es leerlo. Por cierto, por ahí abajo está mi reseña del libro.


- Hibakusha (Cinna + Barboni) (Nota 7): el título de la obra es el nombre que se le da a los supervivientes de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki. Una historia de amor entre un alemán y una japonesa. Y de amistad. Y con algo de trama política. Y con un dibujo muy sugerente.


- La furgo (Tognola + Pardina) (Nota 6): de Oso, un padre divorciado, sin casa después de un desahucio y sin trabajo fijo, que vive en Barcelona en una furgoneta. De sus amigos, de Penélope, de Star Wars y de sus historias diarias. Y de su hija Violeta y los ratos que pasa con ella. Una vida distinta, dura, que refleja también esa ciudad que no ven los turistas. Y con un dibujo "anaranjado" que encaja.


- La historia de los Beatles (Allan + Rastan) (Nota 4): relato cronológico sobre el famoso grupo británico de los sesenta. Con un correcto pero muy poco arriesgado guión y un dibujo normalito, cumple. A ver, es del año 81 y no ha envejecido muy bien, pero cumple la función de darnos la información basica de la banda de Liverpool.


- La joven Frances (Hartley Lin) (Nota 6): Frances es asistenta en un bufete y comparte piso con Vicky, una actriz. De su trabajo en la oficina, de juegos de poder, de la importancia de tener un despacho mejor situado o más grande, de acceder al jefe más jefazo. Y de despidos y empresas que dicen ser familias. Y de series de televisión. Pero sobre todo de la amistad entre las dos protagonistas. Refleja magistralmente ese ambiente que hay en cualquier oficina del mundo. El dibujo le hace bajar la nota.


- La hierba del estío (Lagartos + Iglesias) (Nota 8): de un samurai herido que llega a un pueblo japonés de campesinos. De cómo se recupera y se prepara para un nuevo combate. Pero sobre todo de cómo va volviendo a ser lo que era al principio, antes de ser un gran guerrero, cuando era solo un niño. Con uno de los mejores dibujos que he visto en los últimos años, te hace sentir que estás en una antigua aldea japonesa y refleja perfectamente el código de honor de los samurais. Lo cual tiene mucho mérito teniendo en cuenta que los autores son...asturianos. Una joya encontrada por casualidad.  


- Lo que el viento trae (Jaime Martín) (Nota 4): de un médico, en la Rusia de 1916, que tiene problemas con la policía zarista y consigue salir de Moscú. Su destino: un pequeño pueblo al norte donde sustituye al médico anterior, que ha muerto en extrañas circunstancias. Y de su adaptación a una comunidad más que cerrada y supersticiosa. Muerte, amor, injusticia y sobre todo mucho frío.


- La blusa (Bastien Vives) (Nota 6): un cómic largo, más de 200 páginas, sobre Severine y su vida desde que se pone "la" blusa. Y cómo un acto tan sencillo le cambia la vida (o simplemente le da fuerzas para hacerlo) y consigue además que te enganches a la historia. Y con ese dibujo de pocos trazos que me ha puesto muy nervioso por esa costumbre de mostrar a los personajes a veces con un ojo, otras sin ninguno y en ocasiones con los dos. Distinto.


- El día D - El águila y la cobra (Duval & Pecau + Fafner) (Nota 5): dentro de esta serie con cambios en sucesos históricos, este álbum continúa lo sucedido en "¡Tiembla Roma!". César, ciego por lo que sucedió en Sicilia se ha retirado a su villa en el campo mientras Pompeyo manda en Roma. El conquistador de la Galia ha sido Marco Antonio, que se ha unido a Cleopatra para conquistar Roma. La historia continúa.


- El día D - ¡Tiembla Roma! (Duval & Pecau + Fafner) (Nota 5): esta serie, que no es la primera vez vez que aparece por aquí se basa en que algún suceso importante cambia y la historia no es tal y como la conocemos hoy en en día. Esta vez se trata de que Espartaco no es derrotado en Italia y se embarca con su ejército para ir a Sicilia, donde crea una república de libertos. Y César no puede ir a la Galia porque tiene que ir a pelear con Espartaco. Y lo que pasa entonces.


- Horlemonde (Galliano + Peyravernay & Bazal) (Nota 4): aventuras galácticas y futuristas con un buen y muy detallista dibujo pero con un guión muy corrientito y poco original (malos muy malos, buenos muy buenos, la lucha por la libertad y como no, una historia de amor). Lo dicho, todo muy previsible. Aún así se deja leer.


- Los cosacos de Hitler (Lemaire + Neuray) (Nota 5): una historia de amor, de amistad y de supervivencia en la URSS del siglo XX, justo después de la segunda guerra mundial. Donde muchos cosacos lucharon con los alemanes enfrentándose a los soviéticos. Y de como los británicos se los entregaron a Stalin para acabar muertos o prisioneros durante años en los gulag. Guión y dibujo correcto, perfecto para una calurosa tarde de verano.


- El arte de la guerra (Sun Tzu + Katz) (Nota 5): versión ilustrada de uno de los clásicos militares más famosos de la historia. Había leído una versión orientada a marketing e inversión hace muchos años (y que tendré que volver a hojear), pero nunca me he leído el libro original. El dibujo sin ser malo no es que sea una maravilla, muy estático para mi gusto, aunque luego la adaptación del libro no está mal. Pocas enseñanzas he sacado para el mundo de la educación, pero reconozco que se lee fácil.


- Siberia (Micheluzzi) (Nota 5): muy buenas referencias para este "Doctor Zhivago" del cómic (por aquello del aristócrata ruso en plena Revolución con trenes, mucha nieve siberiana y con soviets por todas partes) que al final no ha sido para tanto. Y no por la historia, llena de intrigas políticas y donde aparece Lenin y todo, quizás por el dibujo, que no me dice absolutamente nada.


- La Brigada Lincoln (Durá + Esquembre + Salguero) (Nota 3): reconozco que el tema de las Brigadas Internacionales (en este caso de los americanos) siempre me ha atraído. Conocía algo además la figura de Oliver Law. Ahora, una vez leído la obra, reconozco su valor como documento histórico, porque como cómic deja bastante que desear, tanto en el ritmo de la historia como en un dibujo que en algún momento hasta se puede calificar de malo. Y con un toque neorevisionista que no me ha gustado demasiado. Es ventajista y poco riguroso enjuiciar los comportamientos del pasado teniendo en cuenta nuestros criterios de hoy en día.


- Invierno 1709 (Sergeef + Xavier) (Nota 5): muy buena pinta tenía cuando lo cogí en la biblioteca, aunque al final no ha sido para tanto. Guión normalito que se lía a veces por un dibujo que te hace confundir a los personajes. Pero acabas con frío, eso sí que lo consigue y con el verano que estamos teniendo, se agradece.


- El arte de morir (Raule + Berthet) (Nota 7): de un policía parisino que se va a Barcelona porque recibe un mensaje de un antiguo amor que le abandonó hace 25 años. Y que se encuentra con algo que no esperaba. Y de intentar saber lo que realmente sucedió. Historia rara, dibujo estilo años setenta, ritmo extraño, cómic que gusta. Y no digo más no sea que lo estropee.


- Lennon (Foenkinos + Corbeyran + Horne) (Nota 7): la vida de John Lennon contada por él mismo a su psicóloga. Va desgranando e interpretando todas y cada una de las situaciones más importantes para él (que no las más conocidas). Desde su nacimiento hasta su muerte en 1980. He descubierto muchas cosas que no sabía del beatle, pero sobre todo me ha permitido meterme dentro de la persona (y del personaje). Con un toque como frío y aséptico (será el dibujo?) el cómic desarrolla muy bien lo que intuyo que quiere contar.


- Ilegal (Colfer + Donkin + Rigano) (Nota 6): la historia de Ebo, un niño de Ghana que decide emigrar a Europa junto con su hermano Kwame. Y todo lo que tienen que pasar para llegar: Agadez, el desierto, los traficantes de personas, Trípoli o una lancha donde ni caben. Y de los que se quedan por el camino. Con un dibujo optimista, uno de esos guiones que llegan.


- Horacio D´Alba (Le Gris + Siner) (Nota 6): intrigas políticas, luchas, muertes, celos, amoríos y hasta problemas familiares y todo ello ambientado en los poderosos estados del norte Italia durante el Renacimiento. Duelos donde antes había guerras y peleas por ser el nuevo Papa. Una historia correcta, aunque con algunos flecos colgando y con un dibujo que no desentona.


- Rosa (François Dermaut) (Nota 6): todo comienza con una apuesta bastante peculiar y cada jugador tiene sus razones para hacerla. De las pequeñas y grandes miserias de un pueblecito francés del siglo XIX. Aunque en el fondo solo es una historia de amor...y muy bien contada.


- Soldados de Salamina (Cercas + García) (Nota 7): leí el libro hace mucho, cuando se publicó y no me disgustó. Luego ví la película, intrascendente. Pero el cómic sí me ha convencido. Sobre Sánchez Maza, un importante falangista, amigo de José Antonio y ministro con Franco. Partiendo de su fusilamiento (que no muerte) en la Cataluña de los últimos días de la guerra civil, el autor nos hace un relato donde entremezcla la historia del personaje con la suya propia para escribir el libro. Y con un resultado que convence. Por cierto con un estilo de dibujo que no me gustó especialmente en otras obras de García (como La muerte sobre Guernica), pero que encaja perfectamente (y no sé porqué) en esta.


- The last ones (Muñoz + García) (Nota 4): una historia apocalíptica (el sol ha desaparecido) en la Barcelona del 2014, de un viaje hasta Francia de una ilustradora de libros infantiles con un grupo de niños. Y para complicarlo todavía más, en un mundo de vampiros, que por cierto han pasado de ser cazadores a recolectores!!! Demasiado para mí aunque hay que reconocer los tres álbumes se leen fácil.


- Harrow County (Bunn + Crook) (Nota 6): un cómic raro, muy original pero un tanto caótico, con brujas y "seres". Dibujo excelente, estilo acuarela pero un último álbum que no cierra bien la historia, o a lo mejor yo no lo he entendido. Pero ese es el sabor que me ha quedado. Eso sí, incluye un material extra abundante y de buena calidad.


- La casa en la playa (Vidal + Pinel) (Nota 7): relato de corte íntimo en la que el autor, utilizando como excusa una casa en la costa francesa, nos cuenta la historia de las dos familias (y en varios momentos) que han vivido en ella. De muchas piezas aparentemente inconexas y que se repiten, pero que acaban encajando perfectamente al final. Y con un dibujo línea clara de los que me gustan a mí.


- Siete sitios sin ti (Juan Berrio) (Nota 6): me fijé en este cómic por la sonaridad de su título. Y porque había leído antes algo de su autor. De Elena y Jorge que se separan. De su primera y ¿última ruptura? De caminar, de hablar y de pensar. Y hasta de sentir.


- Diskettes (Peruzzo + Serra) (Nota 6): uno de los cómics más curiosos que he leído últimamente. De tres estudiantes de informática en la Argentina de los ochenta, de sus comeduras de coco, de sus historias de adolescentes, de sus compañeros de oficina y de su intento de vender un programa pero sin que se entere la empresa para la que trabajan. Y todo ello en "argentino", por lo que al principio me costaba entender todo. Distinto.


- Suero (Pedrosa + Gaignard) (Nota 6): relato distópico de un padre divorciado y antiguo político en una Francia no democrática y fuera de la Unión Europea. Donde se controla a los no conformes dándoles un suero que hace que solo puedan decir la verdad. De lo frágil que puede llegar a ser la libertad que ¿tenemos? en nuestros días.


- Sangre de barrio (Jaime Martín) (Nota 6): Vicen, un adolescente con una familia complicada en el Hospitalet de los ochenta. No le gusta estudiar y empieza a moverse en el ambiente de los pequeños delitos y las drogas blandas. Hasta que pasa lo que no tenía que pasar y todo cambia. A peor claro. Y de como poco a poco, paso a paso y peleando mucho, consigue retomar el control. O solo lo parece? De que hay gente de todo tipo en todos los sitios. Y de que en la vida te tocan las cartas que te tocan y hay que jugar con ellas. Te gusten o no te gusten. Otra de las obras tempranas de Jaime Martín.


- Tante Wussi (Bacher + Alba) (Nota 7): con un más que excelente dibujo estilo acuarela, con poco texto, el comic, con un ritmo lento, muy lento, nos va narrando la historia personal que una abuela le va contando a su sobrina. Medio judía, le tocó de niña vivir tanto en la Alemania como en la Mallorca de los años treinta y cuarenta, sufriendo una guerra después de otra. Llega.


- El maestro de armas (Dorison + Parnotte) (Nota 6): aunque ambientada en la Francia del siglo XVI, la guerra entre católicos y hugonotes es solo la excusa. En realidad es una lucha personal para decidir el tipo de espada. O es mucho más que eso, es el destino y el honor del reino francés? Montañas y frío.


- El final de todos los agostos (Alfonso Casas) (Nota 7): de esos largos veranos de la niñez, de amistades eternas que solo aguantan hasta la adolescencia, de esos primeros amores, de qué pudo haber sido y no fue. De un viaje en el tiempo de más de veinte años a un pueblo costero. De elecciones que se hacen (o no). Una historia distinta y muy personal.


- El hombre de papel (Milo Manara) (Nota 5): llevaba muchos años sin leer a este autor y curiosamente he vuelto a hacerlo con una de sus obras de los primeros ochenta y que me sonaba pero que nunca había caído en mis manos. Con estética de western y ese estilo tan peculiar de dibujo, la historia tiene ese desarrollo caótico con toques psicodélicos que le recordaba yo a Manara, o por lo menos al de esos años cuando lo conocí. Pero ha envejecido mal.


- Duke 1+2 (Hermann + Yves H.) (Nota 7): después de leerlos me quedé con la sensación de haber visto una de esas pelis antiguas de vaqueros de cuando era un crío. Pero en color. Hay publicado un tercer volumen que voy a empezar a buscar ya.


- Los puentes de Moscú (Alfonso Zapico) (Nota 7): con un formato de conversación/entrevista a tres bandas entre Fermín Muguruza (Kortatu), Edu Madina (PSOE) y el propio autor, se nos presenta un detallado, personal, controvertido y hasta original análisis del Euskadi de los últimos cuarenta años. Para haber sido completo echo en falta la cuarta pata de la mesa: alguien que representara a las víctimas mortales del conflicto. Una pena la oportunidad perdida.


- Matar un ruiseñor (Lee + Fordham) (Nota 7): vi la película por primera vez cuando era un crío. Leí el libro de adolescente. Volví de nuevo y varias veces a la película, ya de adulto. Me leí la continuación hace unos años, cuando la publicaron. Y ahora el cómic, que compré mas pensando en mis hijos que en mí. Y siempre me llega, me gusta y le encuentro un nuevo matiz. Recomiendo cualquiera de las versiones, aunque siempre me quedare con la película (un 9 de nota), con ese Atticus Finch que para mí siempre será Gregory Peck.


- El niño (Albumes 6 y 7) (Perrissin y Pavlovic) (Nota 5) mira que los 5 albumes anteriores no me gustaron excesivamente. Pero ahora, con los mismos autores, la historia me ha convencido mucho más, eso sí, sin dejar de ser una obra correcta. Esta vez nuestra protagonista acaba en Afganistán en los años posteriores al 11-S porque trabaja para una ONG y se ve en envuelta en las luchas internas por el poder. Pastunes, muyaidines, americanos, franceses, algún que otro soviético y en el centro de todo nuestra querida Vera. Final predecible y un poco pasteloso para una serie como ésta.


- El violeta (Cochet + Sepúlveda + Santos) (Nota 6): con un dibujo, oscuro, sombrío, el cómic nos cuenta la vida de Bruno, que vive con su tía y es homosexual, en la España de los cincuenta. De lo dura que fue esa época para todos, pero para unos más que para otros. Cárcel, aparentar, hacerse policía, casarse y tener hijos. Y a pesar de todo, una larga historia de amor.


- El vals del gulag (Pellejero + Lapiere) (Nota 7): ambientada en la sociedad soviética de la época de Stalin, ese mundo lleno de miedo, delaciones y personas que desaparecían de un día para otro. Y donde millones acababan en los gulag siberianos. De una mujer que intenta encontrar a su marido, uno de tantos. Y de lo peligroso de esas ideologías totalitarias, que dirigieron las vidas de tantas personas en el siglo XX, y su "pasión" por los campos. De trabajo, de concentración o de reeducación (es que hay alguna diferencia para los que estuvieron allí?). Y de la importancia de esa libertad que a veces no valoramos.


- Ni tierra ni mar (Megaton y Ricard + Genzianella) (Nota 5): de unos niños ricos que alquilan un yate y acaban en una isla con faro. Y de sus juegos de niños ricos. Historia de suspense bien planteada pero mal resuelta y peor explicada. Y con un dibujo correcto. Se podía haber aprovechado mucho más.


- A las cinco de la tarde (Lopez Poy + Fernández) (Nota 4): no he frecuentado yo mucho (por no decir nada) el mundo del toreo. Quizás por eso cuando vi un cómic con un título tan taurino como este me dije que tenía que leerlo. Es la historia real de un torero español, Belmonteño, que triunfó en América en los años 50. Con un dibujo y un guión correcto, digamos que se deja leer.


- La puerta al cielo (Makyo + Sicamoro) (Nota 8): me fijé en este album por el dibujo, que me ganó desde el primer momento. Con el guión me costó más, de hecho al principio no me acabó de convencer. De tres adolescentes con problemas que se escapan y se van a la casa de campo de una de ellas. Pero la manera en que nos muestra esa Francia rural y profunda, la forma en la que se va desarrollando la historia y van apareciendo los distintos personajes me enganchó del todo. Y ese dibujo.


- ¡Serán nuestros! (Barroux) (Nota 7): curiosa la génesis de este comic. El autor encontró por casualidad un cuaderno donde un soldado francés cuenta sus primeras semanas de su reclutamiento durante el verano de 1914. El hambre, la separación de los seres queridos, los viajes sin destino conocido, el aburrimiento o la siempre presente muerte. Y con un dibujo sencillo y más que adecuado a la historia.


- Obelix y compañia (Goscinny + Uderzo) (Nota 4): César ya no sabe cómo derrotar a la aldea gala así que decide que lo va hacer convirtiéndolos en fabricantes de menhires. Y empieza con Obelix. Pero al final lo que consigue es una crisis económica en Roma y los galos siguen siendo amigos. Una historia sobre las leyes del mercado, desde mi punto una de las más flojas de la colección.


- Tocqueville. Hacia un nuevo mundo (Kevin Bazot) (Nota 6): crónica del viaje realizado a Norteamérica en 1831 por el escritor y filósofo francés Alexis de Tocqueville. Una búsqueda donde encuentra, en la frontera, a los indios y sus valores, a los colonos y los suyos, y sobre todo una naturaleza todavía virgen (alucinante el dibujo de esos bosques). Un mundo que empezaba a perder su armonía y comenzaba a desmoronarse.


- Nariz corva (Civielo + Charyn) (Nota 6): intrigas y peleas en la corte de Carlomagno. Contadas por el fraile Bernardo, esclavo de un valí musulmán, criado de una reina y capitán de un señor franco. Un relator peculiar para una historia distinta, pero que va perdiendo fuerza según avanza.


- Destino Sadabad (Xavi + Sasa) (Nota 6): de una chica francesa que descubre accidentalmente que su abuela no ha muerto y que vive en la India. Y allí que se va. Pero no todo sale como ella pensaba. Y se convierte en un viaje que le cambia la vida.


- El tesoro del cisne negro (Corral + Roca) (Nota 7): historia de intriga en la que los héroes son unos funcionarios del Ministerio de Cultura y los malos malísimos, como no, los americanos (tanto en su versión pública como en la privada). Planteamiento muy original (toque irónico por mi parte). De una nave española hundida en el siglo XIX por los pérfidos británicos, su tesoro correspondiente y la pelea por conseguirlo en el XXI. Y con bonus amoroso y de política internacional. Entretenido, buen guión de Guillermo Corral para el ya conocido y siempre excelente dibujo de Paco Roca.


- Esclavos del trabajo (Daria Bogdanska) (Nota 6): las vivencias de la autora, una polaca que se va a Suecia a hacer un curso sobre cómics, que para sobrevivir tiene que trabajar en un restaurante pakistaní de Malmo donde la explotan, que le encanta el punk, que se enamora y que pelea por sus derechos. Historia interesante que se me ha hecho un poco larga.


- Coraline (Craig Russell) (Nota 4): adaptación de la exitosa obra de Neil Gaiman, sobre una niña que va a vivir a una casa que tiene una puerta un tanto "especial". Misterio. La otra madre y su mano. Pero con un dibujo que no me ha gustado mucho.


- Love story a la iraní (Deuxard + Deloupy) (Nota 6): de dos periodistas franceses (mujer y hombre) en Irán y que hablan con los jóvenes de este país. Y nos muestran como es la vida real allí: las relaciones, sus miedos, las familias o el trabajo. Interesante como documento, no tanto como cómic.


- Animal (Colo) (Nota 8): y si una persona quisiera dejar de ser humana, con todas sus consecuencias? Y si legalmente lo consiguiera? Y si matara accidentalmente a otra persona? Qué habría que hacer entonces? Un retrato con estructura de entrevista que se repite una y otra vez de un hombre silencioso y cansado. Está loco o es el más cuerdo de todos en un mundo de locos? Una historia que impacta y hace pensar.


- Bienvenida 1 (Abouet + Singeon) (Nota 6): la ajetreada vida de Bienvenida, que comparte cutre-buhardilla en París con su prima Lola, estudiante de Bellas Artes, canguro, camarera, mala hija (según su madre), siempre sin dinero y sobre todo, buena vecina. Curiosa historia con un más que decente dibujo.


- Sordo (Muñoz + Pulido) (Nota 6): en blanco y negro, es la historia de un maquis en la España de 1942 que se queda sordo al intentar volar un puente. Se echa al monte y vuelve a su pueblo a intentar rescatar a un amigo que tiene detenido la Guardia Civil. Un guión sencillo pero bien desarrollado para un dibujo más sencillo todavía.


- Chateuax Bordeaux (Corgeyran + Espé) (Nota 7): de bodegas, peleas familiares, intrigas empresariales, asesinatos, la inevitable relación amorosa y todo ello en el Burdeos actual, pero sobre todo, de vino. Una especie de Falcon Crest a la francesa y en formato cómic. Casi 500 páginas sobre el tema que han conseguido engancharme desde la primera, aunque también hay que decir que el ritmos decae y el guión empieza a ser bastante previsible en el último tercio de la obra. Partiendo de la base de que no me gusta el vino ni me interesa el sector, hay que reconocer que refleja y explica muy bien todo el mundillo. Me imagino que este cómic debe ser una delicia para los amantes del vino.


- El tercer hijo de Roma (Moenard + Martino) (Nota 3): otra historia de tono conspiranoico, inspirada esta vez en un supuesto hermanastro de Rómulo y Remo y con una secta que pretende acabar con Roma. Y todo apoyado por numerosos personajes reales como Aníbal, Mario o Marco Antonio. El estilo del dibujo, un quiero y no puedo, no acaba de convencerme. Y el guión, más que previsible, tampoco.


- One two three four Ramones (Cadena + Betacourt + Cartier) (Nota 6): la historia del legendario grupo neoyorquino visto a través de los ojos de su bajista Dee Dee. Sí, el que introducía todas las canciones con el mítico 1-2-3-4 Ramones que da título al comic. Una banda (y dale el sentido que quieras a la palabra) más conocida hoy en día por sus camisetas que por su música (y no es que fueran precisamente unos virtuosos...).


- Germinal (Prichard) (Nota 6): basada en la novela del mismo título de Emile Zola, con ese dibujo en blanco y negro y de trazo tan duro típico de Prichard, refleja muy bien el mundo de la mina en la Francia de finales del XIX. Esa lucha no solo entre empresas y trabajadores, sino también las disensiones entre estos últimos. Una historia sórdida pero muy humana y contada desde un punto de vista muy social. Me ha gustado más que la película del mismo nombre.


- El regreso del hombre pez (Isaac Sánchez) (Nota 1): rayada (se escribe así?) total ambientada en Cantabria con muchos seres mágicos y que acaba con una pelea estilo Godzilla de dos de ellos. Guión infumable y un dibujo simplemente correcto. Y le pongo un uno porque ya no se pueden poner ceros. En qué hora...


- Arthus Trivium (Raule + Landa) (Nota 5): que vas a la Biblioteca, estás vagabundeando por las estanterías y de repente ves la portada y te dices que hay que leerlo. Con Nostradamus como uno de los protagonistas, de demonios y brujería y con mucha pelea, al final ha sido menos de lo que prometía al principio. Buen dibujo, guión un poco irregular.


- Flores sobre el asfalto (Jaime Martín) (Nota 5): colección de relatos, aparentemente inconexos, ambientados en la Barcelona de finales de los ochenta. Y no precisamente en la parte más pudiente. Historias y personajes sórdidos. Una de las primeras obras de Jaime Martín. Se puede intuir ya mucho de lo que luego ha sido este autor.


- El Buscón en las Indias (Ayroles + Guarnido) (Nota 9): cuando uno está leyendo un libro empieza a ver cosas relacionadas con él. Por eso, cuando la vi la portada de este comic en la estantería me llamó inmediatamente la atencion: por el tema (las Indias) y por el dibujo. Lo abrí y ya me gustó. Porque si la historia está bien (es la segunda parte nunca escrita de El Buscón de Quevedo) el dibujo es impresionante. Una verdadera joya con un desenlace sorprendente.


- La revolución rusa (Duval & Pécau + Calvez) (Nota 6): como todos los cómics de la serie, una ucronía donde se parte de la base de que en la batalla del Marne hubieran vencido los alemanes y no los franceses y la revolución rusa hubiera sido ganada por los anarquistas y no por los bolcheviques. He descubierto un personaje histórico, "El Tigre" Clemenceau, del que tengo que saber más, porque rascando así por encima en Wikipedia me ha parecido muy pero que muy interesante.


- Homenaje a Cataluña (Lucio + De Miguel) (Nota 7): le tengo mucho cariño a este libro porque fue el que me hizo descubrir a George Orwell siendo un adolescente. Y me impactó mucho en su día, porque aparte de la historia que cuenta, aprendí que el bando republicano durante la guerra civil fue todo menos monolítico. Luego ya pasé a Rebelión en la granja y 1984, por este orden. No lo había vuelto a leer y cuando lo ví el otro día en La Central buscando un regalo que habíamos decidido hacer a un amigo, lo cogí inmediatamente. Y sí, lo leí. Es el libro en formato gráfico y algo más. Y me ha vuelto a gustar. Y espero que este amigo lo disfrute y además lo antes posible.


- Postal (Hawkins + Hill + Goodhart (Nota 6): de un cartero adolescente con Asperger en un pueblo llamado Eden. Un nombre idílico para un sitio que no tiene nada que ver con su nombre. Una historia llena de asesinatos y secretos, con el FBI de por medio, con un toque de romance y donde sobra algo de violencia. Y que va de menos a más.


- Nieve en los bolsillos. Alemania 1963 (Kim) (Nota 7): un excelente retrato de esos emigrantes hoy olvidados (sobre todo los "no oficiales", que iban sin contrato de trabajo) por muchos. Las vivencias personales del autor, un chaval en aquellos años. Lleno de historias duras pero también de momentos agradables. Situaciones complicadas que sacan lo mejor y lo peor de las personaes. De una España muy distinta a la de hoy en día que es parte de nuestro pasado y que debería recordarse en nuestro presente. Porque solo han pasado 50 años.


- Big in Japan (Campuzano y la FEB) (Nota 2): como estamos ahora con el mundial de baloncesto otra vez, pues al verlo en la estantería me puse nostálgico y lo cogí. Lo leí allá por el 2007, un año después de que ganáramos el de Japón. Y me he arrepentido. Lo positivo, los recuerdos que te trae. Lo negativo, lo malo que es el cómic, tanto la historia (la que fue, pero es que es más plana que La Mancha) como el dibujo (debe ser que me voy haciendo mayor, pero es que no he sido capaz de reconocer a la mitad de los jugadores). Resumiendo, que a veces es mejor dejar el pasado en su sitio. Pero a ver si me trae suerte y lo ganamos de nuevo. Porque si llegamos a la final del Mundial y Pau no juega, ya sabemos lo que pasó la última vez...


- El cantante anónimo (Le Gouefflec + Balez) (Nota 6): del fantasma de un crooner francés de los años treinta cuarenta, amigo de Edith Piaf y Charles Aznavour, golfo, colaboracionista, mal padre y marido, timador de sus amigos, pero que llevaba un antifaz, que tenía una voz prodigiosa y que sabía hace reír. La verdad es que la historia es curiosa.


- Apóstata (Ken Broeders) (Nota 7): al principio pensé que se trataba de otro cómic histórico más, en este caso de romanos. Pero cuando uno se va metiendo en la historia (la de Juliano el Apóstata, emperador después de Constantino y de Constancio II) empieza a ver las cosas de forma diferente. El guión muy bueno, los personajes secundarios excelentemente desarrollados y un dibujo de calidad, en especial los fondos que están muy trabajados, hacen que destaque por encima del cómic medio de este tipo, normalmente muy planos. No sabía nada de este emperador, pero luego me he metido en la Wikipedia y he visto que, salvo las típicas licencias que se suelen tomar todos los autores, se ciñe bastante a lo que sucedió. Curioso este Juliano: un hombre de letras que acabo siendo un buen militar y político y que pretendió (sin conseguirlo) reducir la influencia del ya poderoso cristianismo para evitar la disolución del imperio.


- Una primavera en Chernobyl (Enmanuel Lepage) (Nota 7):  de un grupo de dibujantes franceses que se van a preparar un libro sobre Chernobyl veinte años después de la catástrofe. Y mostrar al mundo lo que pasó (y queda) allí. El dibujo es una extraña mezcla de sepia y blanco y negro y algunas viñetas en color. Una mezcla que funciona. Por un lado, las ciudades y los reactores. Por otro, los pueblos y la naturaleza. Lo tétrico y la belleza. Y todo junto, la zona.



- El caso de Charles Dexter Ward (Lovecraft + Culbard) (Nota 7): adaptación de la obra de H.P. Lovecraft del mismo título. Con un ritmo excelente y un dibujo que no desentona, engancha desde la primera página. Una muy buena historia que leída por la noche da miedo. Descubierta curioseando por las estanterías de la Biblioteca.


Filosofía en viñetas (Patrón + Cannon) (Nota 7): guiados por Heráclito, es un viaje por un río en el que los más importantes filósofos nos van presentando los conceptos clave de la filosofía occidental. Denso pero ameno, bien explicado, aunque en más de un ocasión he tenido que releer para entender (creo) las ideas. Pero yo es que no sé mucho de filosofía. El formato cómic funciona muy bien para explicar gráficamente conceptos complicados. Mi idea es volver a sacarlo y leerlo en unos meses, tiene cosas para repensar.


- Absolute Kingdom Come (Waid + Ross) (Nota 7): propuesto por mi gurú particular del cómic, D.Agustín, ya solamente el álbum físico impresiona, primero por el tamaño, luego por la encuadernación y finalmente por la calidad del papel. El dibujante es el mismo del de Marvels, ya comentado por aquí, aunque esta obra es posterior. Y tan bueno y realista como el anterior. El guión, no sé si porque me pierdo detalles y guiños porque no conozco mucho el universo DC, bien. La historia de la retirada y (atención spoiler!!!) posterior vuelta de los superhéroes clásicos para arreglar las cosas me ha gustado. Y el epílgo. Y todos los extras finales. Pero me quedo con la sensación de que no he aprovechado todo.


- Estamos todas bien (Ana Penyas) (Nota 7): una historia que me gustó desde el principio con un dibujo raro que tardó en ganarme, pero que al final lo hizo, y que encaja perfectamente. De las dos abuelas de la autora (de la generación de mi madre) y sus vidas en una España con muy poco en común con la de hoy. De esos últimos años de la vida y de la forma de entenderla en esos momentos.


- La lotería (Miles Hyman) (Nota 8): curiosa la historia de este cómic, ya que está adaptado a este formato por el nieto de la autora original del relato, Shirley Jackson. Y no quiero decir más, salvo que me ha sorprendido y encantado, tanto el guión como ese alucinante dibujo, porque no quiero hacer ningún spoiler. Una inesperada y agradable sorpresa encontrada curioseando entre las estanterías de la biblioteca.


- Marvels. La era de los prodigios (Busiek + Ross) (Nota 7): un cómic distinto, que nos cuenta la historia de Marvel a través de los ojos de un hombre normal, un fotógrafo. De cómo iban cambiando las percepciones del americano medio sobre los superhéroes o los mutantes desde su aparición en los años 30. Una obra diferente con un dibujo realista y no muy común. Un clásico?


- Fahrenheit 451 (Bradbury + Hamilton) (Nota 6): curiosa esta obra porque no es una versión, sino que el guionista del cómic es el autor original del libro, uno de los clásicos de la ciencia ficción. La historia me ha vuelto a gustar, pero su adaptación al cómic y su dibujo no me han acabado de convencer. Supongo que es el problema de comparar algo que leíste hace tiempo y que te gustó mucho con una versión pero en distinto formato y realizado en otro momento. Como primera aproximación a la historia se puede leer, aunque recomiendo la lectura posterior del libro, contiene más matices.


- Secret Wars (Jim Shooter) (Nota 6): creo que me estoy haciendo mayor porque me está dando por ponerme otra vez con algunos de los cómics que leí hace muchos años y que me impactaron. Tengo que reconocer que me ha gustado, pero lo que en su día me pareció algo disruptivo tanto en la forma como en el contenido, hoy en día me ha parecido algo bastante normal y hasta con un toque viejuno (es lo que tienen las obras que se acaban convirtiendo en clásicos). Pero bueno, ver a la Patrulla-X, a los Vengadores y hasta a Magneto peleando juntos contra los malos malosos no es algo que se viera mucho hace más de 30 años. He vuelto a disfrutar. Por cierto, otro de los muchos cómics disponibles en nuestra biblioteca, sí, la que está al lado del Parque.


- Uncle Sam (Darnall + Ross) (Nota 7): una visión muy crítica del sueño americano a través de los ojos de uno de sus figuras más representativas: el Tío Sam. Genial la escena del doble discurso del senador. Y todo acompañado por un excelente dibujo. Me han gustado las páginas finales con la historia y muchas imágenes de este símbolo.


- Patrulla X - La saga de Fénix Oscura (Claremont + Byrne) (Nota 7): releer este cómic muchísimos años después y antes de que se estrene la película ha vuelto a ser una grata experiencia. Pero me ha sucedido una cosa curiosa. Cuando lo hice allá por los ochenta, me pareció muy distinto (en el sentido de que las tramas me parecían más elaboradas o los personajes más humanos y complejos) a otras colecciones como Los Vengadores o Thor. En los últimos años he leído lo nuevo de Vengadores y como ya comenté por aquí, los nuevos guiones y personajes no tienen nada que ver con los de hace treinta años. Y claro, cuando me he vuelto a poner con esta historia antigua de la Patrulla X, pues ahora me ha parecido plana, y lo mismo me ha pasado con los personajes. Y sé que es injusto, porque el mundo ha cambiado y los cómics también. Y sobre todo, yo, claro.


- El día D - El principe de las tinieblas (Duval + Pecau) (Nota 6): qué hubiera pasado si se hubiera evitado el 11-S? Una historia alternativa donde además Kerry le gana las elecciones a Bush, Obama es el vicepresidente y las primaveras árabes son otra cosa. Pero sigue habiendo guerras sucias, y en eso Bob, Carter y el principe de las tinieblas son los mejores. Y si no que se lo cuenten a Bin Laden.


- Pobre cabrón (Joe Matt) (Nota 6): la historia autobiográfica del autor, un guionista y dibujante de cómics. Su día a día, sus muchas inseguridades, sus manías, su obsesión por las mujeres o su absoluta incapacidad para mantener una relación con ellas. En pocas palabras, las vivencias de un pringao. Pero la historia engancha y el dibujo está muy acorde con lo que cuenta.


- Jazz Maynard (Raule + Ibáñez) (Nota 6): siempre tomando como base de operaciones el barrio de El Raval de Barcelona, el protagonista Jazz Maynard, un ladrón con muchos recursos y que me ha recordado a Corto Maltés, se dedica a sus negocios. En todos los episodios (me he leído los 6 primeros, creo que de momento no hay más editado) siempre aparecen sus antiguos amigos, su familia y su amor de adolescente, junto con unos malos malosos que van cambiando de uno a otro álbum. Mucha acción, toque cine negro, crítica a la corrupción. Un personaje al que su pasado no deja de perseguirle. Por cierto, además es un excelente trompetista de jazz.


- Las 7 vidas del gavilán (Cothias + Julillard) (Nota 8): leerse este cómic (la versión integral tiene casi 400 páginas) de una sentada en una tarde tranquila es toda una experiencia. Y de esas que hoy en día, con tantas prisas y todos esos dispositivos móviles que nos van comiendo el terreno y el tiempo, cada vez son más raras. Porque permite entender y disfrutar de la historia completa. Porque puedes ver detalles y relacionar tramas y personajes que con las prisas muchas veces nos pasan desapercibidas. Ambientada en la Francia del siglo XVII, es un retrato lleno de intrigas de la época, usando como hilo conductor siete gavilanes . De aventuras, brujería y política. Curioso el cameo de los tres mosqueteros.


- Medz Yeghern "La gran catástrofe" (Paolo Cossi) (Nota 7): donde nos hablan de la masacre de un millón de armenios por parte de los turcos durante la primera guerra mundial. Una historia cruel, sangrienta y muy poco conocida. Con un dibujo que en ocasiones te deja helado y que encaja perfectamente con lo que se cuenta. Descubierto por casualidad.


- El almanaque de mi padre (Jiro Taniguchi) (Nota 8): una historia sobre la relación de un hijo con su padre, contada a partir de la muerte de éste, cuando el hijo vuelve a su ciudad natal después de muchos años de ausencia. Y de como los hijos van descubriendo a los padres, muchas veces años después, y en este caso, ya tarde. Un relato muy bien contado sobre las relaciones entre padres e hijos. Un manga de esos que yo pensaba, hace unos años, que no existían, y que me recomendó Agustín. Gracias.



- Saint Kilda (Bertho + Chandres) (Nota 7): de un biólogo relacionado con Darwin que llega a una isla escocesa aislada del mundo. Un paraíso en la tierra. O no? Porque una vez repuesto de la sorpresa inicial, el recién llegado empieza a descubrir cosas y a atar cabos. Y no todo es lo que parecía. Buena historia y mejor dibujo.


- Stuck rubber baby - Mundos diferentes (Howard Cruse) (Nota 7): al principio me costó, por ese dibujo tan detallado y denso, porque a veces es complicado leer el texto, porque tardé en coger el ritmo de la historia. Pero me ha acabado gustando bastante. Una historia dura, con muchos recovecos. Ambientada en la época de Kennedy, el protagonista nos va sumergiendo en la América más profunda, un mundo racista donde los homosexuales lo tenían todavía peor.


- El diario de Ana Frank (Folman + Polonsky) (Nota 6): versión en cómic del famoso diario, donde se cuentan las vivencias de una adolescente que se ve obligada a encerrarse, junto con su familia y otras personas judías, para evitar la deportación a los campos de concentración/exterminio nazis. Ambienta en la Holanda de la segunda guerra mundial. Hace muchos años que leí el libro, así que me resulta difícil comparar. Lo único que puedo decir es que la historia me ha vuelto a entristecer y a hacer pensar.


- Bok Redux (Martínez del Vas) (Nota 6): leerlo me ha traído muchos recuerdos de mi época universitaria. Es una colección de muchas de las tiras que el autor fue publicando en la Gaceta Universitaria, con el alienígena verde Bok como protagonista. No sé como será para estudiantes de otras carreras, pero para Arquitectura o Ingenierías es que lo clava.


- Una hermana (Bastien Vives) (Nota 7): dibujo sencillo, muy línea clara, con los personajes sin ojos que al principio me ponían nervioso. De una semana de vacaciones en la costa francesa. De amigos que se reencuentran y de sus hijos que simplemente se encuentran. De niños que  cambian a adolescentes y adolescentes que comienzan a ser adultos. Y del primer amor.


- Asterix en Italia (Ferri + Conrad) (Nota 5): nuevo álbum de los galos más famosos del mundo, esta vez tomando parte en una carrera de carros en Italia. No son Goscinny y Uderzo, pero es la misma fórmula de siempre. No sorprende, pero sigue funcionando. Había que leerlo. Y vas conociendo Italia.


- El soldado (Jouffray + Efa) (Nota 7): ambientado en la guerra civil americana, este cómic nos cuenta las vivencias de un soldado de la Unión recién llegado al frente. Patriotismo, héroes, compañerismo, muerte y sobre todo, miedo, todo ello acompañado por un excelente dibujo. Un alegato contra el belicismo protagonizado por un chaval que va cambiando sus ideas sobre la guerra según la va viviendo.


- Equatoria (Díaz + Pellejero) (Nota 7): basado en la obra de Hugo Pratt, hay que reconocer que Díaz y Pellejero son capaces de mantener ese ritmo, esas viñetas sin o con muy poco texto o esa altanería/chulería tan típica de Corto Maltés. Una historia que comienza en Venecia, sigue en Alejandría y acaba en el África más profunda. Y todo para buscar un espejo.


- El hijo (Torrecillas + Alba) (Nota 7): una historia triste y dura, pero muy bien contada. De un boxeador que vuelve a la Barcelona de posguerra a buscar a su familia. De unos enfermos que se escapan de un manicomio en el Pirineo. Y de un faro. De locos y cuerdos, de vencedores y vencidos. Y todo muy violento y oscuro. Pero mucho más humano de lo que parece a primera vista.


- A la sombra del convoy (Toussaint + Beroy) (Nota 6): historias entrecruzadas con muchos personajes de distintas generaciones y nacionalidades, pero usando como personaje central a Olya, una mujer judía, y todo ambientado en esa Europa maltratada entre 1914 a 1945. A veces un poco lioso, todo encaja al final. Basado en un hecho real y relatado por un superviviente del Holocausto.


- El juego lúgubre (Paco Roca) (Nota 5): otro comic de los inicios del autor, otro en el que le doy un 5 porque se trata de él. Ya se ven detalles, pero todavía no es el que ha llegado a ser posteriormente. Una historia sobre un ayudante de Salvador Dalí en el Cadaqués de los días previos a la guerra civil. Una rayada.


- Marzi 1989 (Savoia + Sowa) (Nota 5): crónica de la Polonia de 1989, con Lech Walesa y la caída del Muro, vista a través de los ojos de una niña. Con la política como fondo, son sobre todo historias personales y del día a día. Me he quedado con la impresión de que todo era muy parecido a nuestra España de diez años antes, cuando la Transición. Épocas de cambio .Aunque sus más de 200 páginas al final se me han hecho un poco largas. Hay una obra anterior, Marzi 1984-1987, que como indica su título, se centra en los años previos, los finales de la dictadura comunista. Pero que de momento no me apetece leer.


- Rowans ruin (Carey + Perkins) (Nota 6): curioso lo de este cómic. Partiendo de un dibujo distinto, que a veces parece como mal hecho pero que otras no, narra una historia, bastante irregular y previsible, de fantasmas y asesinatos. Pero me ha gustado y ahora mismo no sé decir porqué.


- Los inocentes (Gipi) (Nota 7): fue leer por primera vez a Gipi y reconozco que me ganó. Y no me ha defraudado tampoco con este album. Historias simples pero a la vez complejas. Y siempre duras. Esta vez va de un niño y de su tío, que ha quedado con un antiguo compañero de andanzas juveniles. Muchos años después y al salir los dos de la cárcel. Un viaje familiar distinto. Como todo lo que hace Gipi. Y con ese dibujo tan característico.


- La muerte de Guernica (Paul Preston + José Pablo García ) (Nota 4): para conocer la historia, bien, muy detallado. Como cómic, normalito tirando a malo, con un dibujo bastante soso y menos ritmo que una canción de Hare Krishna . Leído está, que ya es.


- Capitán Trueno - El círculo de la muerte (Editorial Bruguera) (Nota 7): comic de 1975, lo cogí porque al ver la portada (la que pongo aquí) recordé haberlo leído cuando era un niño. Con esas letras de máquina de escribir antigua y sin ninguna referencia al autor (entiendo que Mora y Ambrós), con Goliath, Crispín y Sigrid, en esta ocasión se reunían todos los malos malosos para acabar con el Capitán...y casi lo consiguen. Me ha vuelto a gustar....y hasta me ha hecho rejuvenecer un poco!!!


- La sangre de los cobardes (Delitte) (Nota 6): una doble historia (ambas durante el siglo XVII, una en la isla de Java y otra en Inglaterra y aparentemente inconexas) de asesinatos y estafas. Y dos investigadores que intentan desvelar los misterios. Y todo ello entre conflictos raciales, dinero, mucha ambición y sobre todo mucha sangre. Y al final el cóctel sale decente.


- Dr. Uriel (Sento) (Nota 8): crónica de la guerra civil española a través de los ojos de un médico recién licenciado. Una historia real con buenos y malos, reales y humanos, que poco tiene que ver con el bando al que pertenecían. Y con un dibujo que me costó al principio, pero que al final acaba encajando perfectamente con el espíritu de la historia. Descubierto por casualidad.


- El fango (Cloonan) (Nota 6): brevísimo relato sobre un caballero y su escudero, una ciénaga y sobre todo, amor y muerte. Bien contado y dibujado, me ha gustado.


- Los pitufos olímpicos (Peyo) (Nota 7): la valoración no es tanto por este álbum en concreto sino por la tertulia posterior a su lectura que mantuvimos en el club de cómic. Cada uno teníamos que leer uno distinto y luego comentarlo. Y me sorprendió descubrir (porque yo me lo leí y no me enteré de nada!!!) la cantidad de temas (política o la situación de la mujer, por ejemplo) y matices que Peyo fue capaz de introducir, tratar y exponer en un cómic en principio infantil, en plenos años sesenta y setenta. Tiene mucho más de lo que inicialmente parece. 


- Te devuelve la mirada (JSB) (Nota 6): comienza como la típica/tópica película de cine negro americana (el cliente que llega a la oficina de un detective privado, sí, ese que está de vuelta de todo y que, cómo no, tiene amigos en la policía), mete en la trama a un dios antiguo en busca de seguidores y acaba, bueno, no digo como acaba. Todo muy oscuro, incluido el dibujo.


- Megalex (Jodorowsky + Beltran) (Nota 5): no había vuelto a leer nada de Jodorowsky desde "El Incal", y eso fue hace muchos años. Y reconozco que en su momento me impresionó. Pero debe ser que me voy haciendo viejo o que cada vez me cuesta leer más cosas profundas. Porque me ha costado leer este comic. Con un excelente dibujo, entender lo básico de la historia (porque conociendo a este autor seguro que hay mucho más de lo que yo he sido capaz de adivinar) me ha supuesto un esfuerzo que ha hecho que su lectura no haya sido lo placentera que me hubiera gustado. Un relato de ciencia ficción sobre la lucha entre la tecnología y la naturaleza. Lo apunto para releer más adelante.


- March (Lewis + Audin + Powell) (Nota 5): la historia de la lucha por los derechos civiles de los afroamericanos, durante los años 60, tomando como hilo conductor las vivencias de John Lewis, un congresista americano. Como documento histórico está bien, he aprendido muchas cosas que desconocía. Pero como cómic es otra cosa. Excesivamente largo (casi 600 páginas), y con un dibujo correcto, la falta de ritmo del relato consigue que al final la historia se haga interminable. Supongo que para el lector americano será distinto. Lo dicho, le doy el aprobado por el valor histórico que tiene. 


- Matteo (Gibrat) (Nota 5): mira que le he dado oportunidades a Gibrat. Y mira que su dibujo es de los que más me gustan y realmente lo disfruto. Pero cuando llegamos a los guiones y los personajes, pues eso, que me dejan frio. Aún así seguiré leyéndolo. En este cómic nos cuenta la historia de Matteo, un joven español que vive en Francia y que acaba viviendo las trincheras de la Gran Guerra, la revolución rusa y la victoria del Frente Popular en Francia.


- Jan Karski. El hombre que descubrió el holocausto (Rizz + Bonaccorso) (Nota 7): me puse a leer el cómic directamente y me pareció que estaba muy bien contado. Cuando luego me leí todo lo que no era comic (es la historia de una persona real) me quede impactado. Por lo que descubrió, por lo que contó (y a quién!!!) y por el poco caso que le hicieron. Contiene escenas que te hacen pensar en cómo somos los seres humanos. Y no precisamente para bien.


- Scarface. Marcado de por vida (Layman + Crosland) (Nota 4): secuela en forma de cómic de la famosa película de los ochenta protagonizada por Al Pacino. Tony Montana sobrevive milagrosamente al famoso tiroteo final y comienza su venganza contra Sosa. Bolivianos, Miami, el Gordo, los hermanos Díaz, el general ruso (ucraniano!!!), la DEA, muchos tiros y drogas y Elvira.


- Contrato con Dios (Will Eisner) (Nota 8): otra relectura (después de muchos años) de un clásico. Y diría que hasta me ha parecido mejor que la primera vez. Cuatro historias, de judíos que firman contratos, de cantantes callejeros, de "supers" y de personas que quieren arreglar sus vidas con un buen matrimonio. Todas ambientadas en los barrios más humildes del Nueva York de los años 30. Y creadas por Will Eisner, un adelantado a su tiempo, tanto en el guión como en el dibujo, con un formato muy peculiar. No sé a que esperas para leerlo.



- Los hijos de la Alhambra (Paco Roca) (Nota 5): yo es que en cuanto veo Paco Roca, lo tengo que leer. De la historia de un dibujante francés, muy bohemio él, que llega a la Alhambra en el siglo XIX, eso sí, después de Washington Irving. Y luego la consabida ración de leyendas, tesoros, moriscos y similares. Se ven algunos detalles, pero en conjunto, una obra menor.


- Superman: hijo rojo (Millar) (Nota 5): historia tipo "What if" suponiendo que Superman hubiera caído en la Unión Soviética en vez de en Estados Unidos. De inicio, muy sugerente. Pero no le saca el partido que tiene. Simplemente correcto.


- Forjaron la historia: Napoleón (Simsolo + Fiorentino) (Nota 6): la serie "Forjaron la historia" nos habla de la vida de algunos de los personajes que más han influido en la historia universal (Genghis Khan, Churchill, Saladino o Juana de Arco, entre otros). A cada uno de ellos se le dedica un álbum, que en este caso son tres (se nota mucho que la editorial es francesa por la gran cantidad de personajes que hay de esta nacionalidad en la colección ). Ya hablando de los de Napoleón, me han permitido conocer muchas cosas que no sabía, así como situar cronológicamente otras muchas. Dibujo muy línea clara de esos que me gustan a mi, con mucho detalle, sobre todo en las batallas y en los planos generales. Pero se me ha hecho un poco largo, uno acaba cansado de tanta intriga y tanta batalla.


- Los hijos de la libertad (Levy + Grand) (Nota 4): crónica de uno de los grupos de resistentes en Francia (que no franceses) durante la segunda guerra mundial, donde se ve también el lado oscuro del colaboracionismo con los alemanes. Muy lineal, con personajes mal definidos y un dibujo correcto. Una mejorable adaptación de la novela de Marc Levy.


- Tatuaje - Carvalho (Migoya + Seguí) (Nota 6): tuve mi época "carvallesca" allá por los noventa, cuando devoraba las novelas de Vázquez Montalbán. Y tan rápido como llegó, pasó. En la edición de este cómic ha intervenido el hijo del escritor catalán, muerto hace años. Así que se supone que esta es la versión "oficial" en cómic de los libros de su padre. Y me ha gustado, sobre todo la definición de los personajes, muy parecidos a los que yo recordaba. En cuanto a la historia, no sé si por el tiempo que ha pasado o porque yo he cambiado, no me ha gustado tanto como las de los libros. Si siguen con la colección (que por libros de Carvalho no será!!!) le daré otra oportunidad.


- The kitchen (Masters + Doyle) (Nota 1): tres mujeres irlandesas que deben seguir con los negocios de sus maridos, mafiosos irlandeses, en el Nueva York de los setenta. Historia mal desarrollada y poco creíble, un dibujo muy básico y al que no le sobra calidad. Y estoy siendo educado. Tiempo perdido.


- La balada del norte - Tomos 1 y 2 (Alfonso Zapico) (Nota 7): usando como centro el personaje de Tristán, hijo del marqués de Montecorvo y propietario de minas (entre otras cosas), nos cuenta desde un punto de visto distinto el desarrollo de la revolución que se produjo en Asturias en 1934 contra el gobierno de la República. Me ha llamado la atención que el autor plantee la tesis de que la Guerra Civil comenzó realmente en este momento y no en 1936, algo que solo le había escuchado al historiador Pío Moa (y desde una perspectiva política muy distinta, todo hay que decirlo). Una obra larga, de estética clásica, con unos personajes quizás un poco arquetípicos, pero con un argumento perfectamente desarrollado. Falta por publicar un tercer tomo (previsto para 2019) para completar la trilogía.


- La gran odalisca + Olympia (Vives/Ruppert & Mulot) (Nota 5): de tres ladronas (bueno, empiezan dos) que un día están en Méjico peleándose con un cártel de la droga y al siguiente robando "La gran odalisca" en el Louvre. Luego les toca el Museo del Ejército y acaban trabajando para la mafia y entrando en el Petit Palais de París para conseguir la Olympia de Manet, entre otros. El dibujo me ha gustado mucho, las historias muy corrientitas.


- La muerte de Stalin (Nury + Robin) (Nota 7): últimamente me han estado llegando muchas cosas sobre Stalin. Que si el libro "La corte del zar rojo", que si la película "La muerte de Stalin" (estrenada hace poco, una comedia con muy buena pinta) y finalmente el cómic. Y he empezado por este. Con un tono muy frío y un dibujo muy "soviético", nos cuentas las últimas horas de la vida y las primeras después de la muerte del dictador. Envidias, intrigas, miserias, juegos de poder. Política en estado puro. Denso, para leer con tranquilidad, fijándose en los detalles, tanto del guión como de las ilustraciones.


- El niño (Albumes 1-5) (Perrissin y Pavlovic) (Nota 2): 5 volúmenes sobre dos hermanos unidos físicamente y separados al nacer. Cuando uno de ellos, Vera, cooperante, lo descubre, se pone a buscar al otro. Pero este, Kolya, no tiene una vida muy estable. Vagabundo, marino o pirata. Asia, Sudamérica y Europa. Personajes muy planos. Se me ha hecho muuuuy largo.


- Las sombras del estigio (Isabelle Dethan) (Nota 6): ambientado en una ciudad romana del norte de África a principios del siglo III, nos cuenta la historia de Marco Selo Dento, un investigador enviado por el emperador Septimio Severo, que tiene que resolver un caso de asesinatos en serie de niños. Argumento entretenido y dibujo correcto. Se deja leer.


- El hobbit (Tolkien + Dixon + Wenzel) (Nota 5): primero decir que ni el libro ni la película sobre esta precuela de El señor de los anillos me acabaron de enganchar. En cuanto al comic, decir que refleja muy bien la obra original de Tolkien. Quizás demasiado. Abusa del texto y deja literalmente poco espacio para el dibujo. Y como en el libro, el ritmo es un poco lento, pero una vez que te adaptas (y el excelente dibujo ayuda mucho), se lee bien. Eso sí, me he quedado con la sensación de haber leído, más que un comic, un cuento ilustrado de esos de cuando era pequeño.


- La danza del tiempo (Igor Baranko) (Nota 6): curiosa historia con un buen dibujo. Cuatro-vientos es un indio lakota que rapta a una princesa pawnee. Y a partir de ahí, pasa de todo. Una historia de amor, que no romántica. Una historia de brujería, que no de brujas. Una historia de viajes en el tiempo, pero sin máquinas. Una historia de muertos, pero no del todo. Argumento muy original que se acaba entendiendo al final.

- La Visión (King + Walta) (Nota 7): reconozco que, hasta esta lectura, lo único que sabía de la Visión es que existía. Era un superhéroe que me había pasado totalmente desapercibido. Pero después de haber leído estos dos volúmenes mi "visión" del personaje ha cambiado radicalmente. Lógico, frío, complejo y a la vez muy humano. Y con unas relaciones familiares distintas y muy peculiares. Un guión excelente perfectamente acompañado por el dibujo. La pena es que no conozco mucho el universo Marvel y eso me hace perderme o no saber apreciar muchos detalles.


- Los surcos del azar (Paco Roca) (Nota 6): otro de los comics que he vuelto a leer. Indispensable para conocer la historia de esos perdedores de la guerra civil que lucharon luego en Francia y ganaron, aunque no les sirvió para nada aquí en España. Porque los primeros soldados aliados que liberaron París era un grupo de soldados republicanos españoles. No me ha gustado tanto como la primera vez, me quedo con el sabor de una historia plana.


- Nazi zombies (Joe Wight) (Nota 4): vamos con ello. El cómic va de una misión que tiene que realizar un comando británico en los últimos días de la segunda guerra mundial, en Alemania: evitar que los nazis pongan en marcha, a gran escala, su arma secreta final: convertir a sus soldados en zombies. Obviamente, los malos son de las SS, que ya tiene su pequeño ejército....de zombies. Es corto y todavía estamos en verano, así que se deja leer.


- Shooting war (Lappé + Goldman) (Nota 7): una cadena de televisión que solo se dedica al terrorismo. La guerra en Irak que continúa. McCain que derrotó a Obama en las presidenciales del 2008. Explosiones nucleares en India. La Espada de Alá y Al Quaeda. Los iraníes. Robots. Y en medio de todo esto, un blogero izquierdista con "el don de estar en el momento y lugar justo cuando hay personas que van a morir". Con una estética de canal americano de TV muy impactante.


- Dentro de la secta (Henri + Alloing) (Nota 6): de como Marion, una chica absolutamente normal, en la Francia de los noventa, es captada por una secta. Poco a poco, día a día, casi sin darse cuenta. Y de los mecanismos usados por estos grupos. Un relato en primera persona de alguien que consiguió salir. Da miedo de lo normal y cotidiano que es todo el proceso.


- O'Boys (Thirault + Cuzor) (Nota 7): con un protagonista que se llama Huck Finn como el de Mark Twain, una historia de búsqueda en esa América rural y sureña de la Depresión. Blues, trenes, racismo , pobreza, lucha, amistad y mucha miseria. Con un dibujo alucinante.


- 300 (Frank Miller) (Nota 8): lo he vuelto a leer después de muchos años y de haber visto la película, y me sigue impresionando. Tanto la historia como el dibujo. Y como entonces, mi personaje favorito vuelve a ser el rey Jerjes. Un cómic para leer periódicamente. Poco más puedo decir.


- La amenaza roja (Bilson + DeMeo + Brody) (Nota 2): de un superhéroe americano de los 50 (demasiado parecido al Capitán America, si hasta se llama Steve!!!) que es acusado de comunista por el senador McCarthy. Pero un superheroe novato (y que se enamora de la hija del Águila, que así se llama el protagonista) le ayuda y consiguen al final acabar con los malos, que son unos antiguos delincuentes por un lado y por otro un agente del FBI con pasado nazi. Y conseguir que una bomba nuclear no explote en Los Ángeles. Delirante. De verdad, para leer cómics de este tipo, mejor ir a Marvel. Porque ni en el dibujo son originales.


- La anciana que nunca jugó al tenis y otros relatos que sientan bien (Zidrou) (Nota 8): coleccion de quince historias con guión de Zidrou e ilustraciones de varios dibujantes. Cada una con su estilo conforman una obra excelente y para mi sorpresa, para nada irregular. Una joya descubierta totalmente de casualidad.


- Mother Russia (Jeff McComsey) (Nota 5): si empiezo diciendo que va de un francotirador soviético en Stalingrado seguro que muchos pensáis inmediatamente en la película "Enemigo a las puertas". Pero si os digo que es una francotiradora y que además ya no quedan soldados vivos (ni soviéticos ni alemanes) porque se han convertido en zombies, la cosa cambia. Y no porque se trate de una obra divertida. Eso sí, partiendo de una idea original, se va desinflando y al final se convierte en algo muy normalito. Creo que daba para mucho más.


- Apuntes para una historia de guerra (Gipi) (Nota 7): tres ¿amigos? en una guerra que ni se sabe cual es. En Europa. Ahora. Una guerra sin batallas, sin banderas, sin ejércitos pero con violencia, una lucha diaria entre milicianos sin uniforme que van a lo suyo. De niños que se hacen hombres pero que a la vez se deshumanizan. De vidas en las que no hay esperanza. Y unas caras dibujadas que dan miedo. 


- El perro de los Baskerville (Eddington + Culbard) (Nota 7): adaptación al comic de la conocida historia de Sherlock Holmes escrita por Arthur Conan Doyle. Leí el libro hace años, vi la famosa película de Peter Cushing y también el capitulo del mismo nombre de la reciente serie Sherlock (digamos que se inspira en el libro). Y me sigue gustando y sigo descubriendo cosas nuevas. Estilo sencillo, está bien esta cuarta versión.


- Las amapolas de Irak (Findakly + Tronheim) (Nota 6): reconozco que una historia sobre Irak desde los años sesenta y contado por una niña del país me sonó mucho a Persepolis y me animó a leerlo. Y no es lo mismo. Para nada. Pero sé que la comparacion no es justa. Es una buen relato, quizás un poco caótico a veces, y con un formato y un dibujo distinto pero que me ha gustado.


- Adelante! (Giroud + Rey) (Nota 7): ves la portada, lo abres y el dibujo te llama la atención. Así fue mi primer contacto con este cómic. Y la historia, ambientada en la Andalucía invadida por las tropas napoleónicas, me gustó. De guerilleros, franceses, amores, secretos familiares, caballos, intrigas políticas y batallas, muchas batallas. Y con un cameo del General Castaños. Una pena la última página. 


- Un noruego en el Camino de Santiago (Jason) (Nota 6): el título ya lo dice casi todo. El relato de los más de 800 kilómetros y un mes de viaje desde Pirineos hasta Finisterre, donde el autor nos va contando todas sus experiencias (situaciones, personas, conversaciones, ampollas). Interesante para un peregrino, creo que hay muchos detalles que deben ser difíciles de entender si no lo has hecho, así que recomiendo leerlo después, no antes. La historia me ha gustado, el dibujo, con esos personajes sin ojos, no tanto.


- El mundo a tus pies (Nadar) (Nota 8): tres historias de la España de hoy, reales, duras. De amores muy distintos a los de las películas, de familias que sobreviven a la crisis y de una teleoperadora. Tres historias donde hay mucha rabia, mucha injusticia, muchos sueños no realizados, pero también ganas de sobrevivir y algo de esperanza.


- The Corner (Palloni + Settimo) (Nota 6): me llamó la atención por un dibujo extraño, con unas caras muy raras en los personajes. En una historia ambientada en el Boston de los ¿felices? veinte, se mezclan la mafia, los anarquistas, el FBI, Italo Serpio, el viejo e intrigas internacionales. Y de trasfondo, la familia y los ideales. Cuesta al principio, luego engancha.


- El solar (Alfonso Lopez) (Nota 8): retrato de la España de finales de los cincuenta, la de "los años del hambre", que decía mi abuelo. Todo relatado en clave de humor muy "Groucho Marx", con un dibujo al estilo de los tebeos de aquellos años, aunque un poco más evolucionado, pero sin dejar de tener un trasfondo muy duro. Y con muchas apariciones de personajes reales, como Antonio Machín, Manolete, Simon Wiesethal o el mismísimo Franco.


- Heavy. Los chicos están mal (Miguel B. Núñez) (Nota 6): crónica del Madrid de los ochenta teniendo como protagonista a un grupo de jevis. El barrio, la música, rockers, punkis, breakers, pijos, quinquis, mods, skinheads, todas las tribus urbanas tienen cabida en esta historia. Y también de cine, comics, pelos largos y mucho guitarreo.


- V de Vendetta (Allan Moore) (Nota 8): reconozco que aunque me habían hablado mucho y bien de este comic nunca me decidía a leerlo. Quizás porque ví la pelicula en su día y no me acabó de convencer. Y tampoco ayudaba mucho que tenga más de 300 páginas. Pero Agustín lo propuso como lectura en el club y eso para mí es una garantía. Y me gustó desde la primera viñeta. A veces me costaba seguir el argumento, pero me enganchó. Me llevó un par de tardes, largas pero agradables. Eso sí, la historia te deja un regusto amargo. Por poner un pero, y siempre dentro de la calidad de la obra, creo que el dibujo, aún siendo bueno, no está a la altura del argumento. Por cierto, muy distinto a la película.


- Sykes (Armand y Dubois) (Nota 5): un inicio impactante, una estética "Sin perdón" para un western con muy buena pinta, pero que se va diluyendo según avanza. Y con un final flojo. De asesinos, marshalls, sheriffs, indios, salones y todo eso. Nada nuevo bajo el sol, da para una tarde entretenida.


- Batman. El regreso del caballero oscuro (Frank Miller) (Nota 8): me da un poco de vergüenza decir que es el primer cómic de Batman que leo. Y al principio me ha costado, quizás porque no situaba bien a los personajes y no entendía muchas cosas de la historia. Pero después de una sesión del club, todo ha cambiado. Agustín es único explicando esto de los comics, los detalles, los porqués y todo eso que uno debe saber para comprender muchas cosas. Así que volví a leerlo desde el inicio y me ha gustado mucho más. Mi idea ahora es ver la Trilogía del Caballero Oscuro de Nolan y después leer otra vez este comic. Ya os contaré.


- El vuelo del cuervo (Gibrat) (Nota 3): excelente dibujo, por eso me llamó la atención. En París, un ladrón y una miembro de la resistencia francesa se conocen en los días posteriores al desembarco de Normandía. Pero el argumento tiene menos gracia que yo contando chistes. Un caramelo tirando a soso, pero eso sí, con un envoltorio insuperable.


- La balada del Mar Salado (Hugo Pratt) (Nota 8): releer uno de los clásicos (ya ha cumplido los cincuenta!!!) muchos años más tarde tiene un pequeño problema: uno ha cambiado y el comic no. Acostumbrado a estas velocidades que llevamos hoy en día, reconozco que al principio me ha costado habituarme al ritmo de la historia (el dibujo me sigue pareciendo excelente), pero al ir pasando páginas, según me iba metiendo en el relato, la sensación ha desaparecido. Y recordar a Corto Maltés y a Rasputín, con sus cosas, ha sido muy agradable. Una vez leída la primera aventura de Corto, tendré que continuar con el resto en breve.


- Crónicas birmanas (Guy Delisle) (Nota 6): después de leer Pyongyang me apetecía volver a leer algo de este autor. Así que lo cogí con ganas. Pero estando bien, no ha sido lo mismo. Son sus experiencias de cuando estuvo viviendo en Myanmar (antigua Birmania) durante un año, acompañando a su mujer, que trabajaba para Médicos sin Fronteras. Uno de los países más cerrados del mundo. Pero no sé porqué, si por el dibujo, la historia en sí o porque es muy largo, no me ha gustado tanto como Pyongyang. Pero se puede leer.


- Intemperie (Javier Rey) (Nota 9): nada más verlo lo cogí. Había leído el excelente libro de Jesús Carrasco hace unos años y ya la portada del comic me gustó. Y el resto también. Retrato de esa España seca y dura. De un niño que huye y un viejo cabrero. Supervivencia. Y un dibujo perfecto para la historia.


- Cita en Phoenix (Tony Sandoval) (Nota 6): relato autobiográfico del autor, donde nos cuenta cómo consiguió cruzar, de forma ilegal, la frontera entre México y Estados Unidos, para reunirse con su novia y comenzar su carrera en el mundo del comic. Después de leerlo da la sensación de que no es ni tan caro ni tan difícil, no sé si esto es lo que pretendía el autor. 


- Complot. El crac del 29 (Gihef + Alvante + Brahy) (Nota 3): la idea inicial me llamó la atención: los nazis fueron los responsables del crac. Así que me puse a leer. Pero ya el dibujo me pareció vulgar. Y luego la trama era todo menos creíble (lo de la relación entre el protagonista y la mismísima Eva Braun es de traca!!) y bastante previsible. Resumiendo, un chasco. Por lo visto después es solo el primer album de una serie al estilo de " El día D". De momento en España solo se ha editado este. Y si se queda así, tampoco se va a perder mucho.


- Las serpientes ciegas (Cava y Seguí) (Nota 7): de alguien que busca a alguien, en el Nueva York justo entre nuestra guerra civil y la guerra mundial. De brigadistas, gente del POUM y comunistas estalinistas. De la batalla del Ebro y de sobrevivir. Y de promesas que hay que cumplir. A veces me he liado un poco con tanto flashback y líneas argumentales. Distinto.


- El guardián invisible (Ernest Sala) (Nota 6): adaptación de la novela del mismo nombre de Dolores Redondo, cosa de la que me enteré una vez leído, porque después de acabarlo me parecía que quedaban muchas cosas pendientes y me puse a investigar. Y es solo la primera parte de lo que se conoce como la "trilogía del Baztan". Y también hay película. Y un comic de la segunda parte. De todo, vamos. Yendo al comic, trama policíaca en la Navarra rural. Nada nuevo bajo el sol, cuesta entender al principio la historia personal de la protagonista. Lo que no me ha acabado de convencer es el dibujo, no me cuadra con la historia. Pero le daré una oportunidad a la segunda parte.


- Britannia (Milligan y Ryp) (Nota 8): partiendo de un excelente dibujo de Ryp, Peter Milligan nos lleva a la Britania romana recién conquistada, en la época de Nerón. Vestales, druidas, legiones y brujas se mezclan en una historia bien construida, llena de asesinatos, con el centurión Antonius Axia como protagonista. Tiene todas la pinta de que habrá más. Y por cierto, sin nada que ver con la serie del mismo nombre que se ha estrenado recientemente.


- The Ultimates - Superhumanos (Mark Millar + Bryan Hitch) (Nota 6): tengo que reconocer que en el momento que lo leí no me encantó precisamente. Había muchas cosas que no entendía (Nick Furia de repente no es blanco, el Capitán América resucita de nuevo o Thor es un hippie antisistema, por ejemplo). Hasta que luego, en una sesión del club de comic, Agustín nos explicó todo. Y la relación del universo Ultimate (distinto al clásico) con el creado para las nuevas películas del universo Marvel. De ahí ese dibujo tan espectacular y peliculero. Y muchas cosas encajaron.


- Como viaja el agua (Juan Diaz Canales) (Nota 4): la portada y la contraportada prometían, pero al final no era para tanto. Un excelente dibujo en blanco en negro muy acorde con la historia: un grupo de mayores de 80 años que se dedica al tráfico de cosas robadas en Madrid. Una mezcla de serie negra con novela costumbrista. Sobre el miedo a la muerte. Pero la historia no acaba de cuajar, muy liosa y no muy bien resuelta. Solo decir que todo el mundo habla maravillas de este comic, pero que a mí sinceramente no me ha gustado mucho.


- Buffalo Runner (Tiburce Oger) (Nota 7): la historia de uno de aquellos cazadores de bisontes que acabaron con ellos en la expansión hacia el Oeste en el siglo XIX. Una vida dura, llena de altibajos, con muchas pérdidas pero siempre con la voluntad de sobrevivir a toda costa. Una sucesión de venganzas que acaba, como no, con otra.


- Aguas negras (Nabiel Kanan) (Nota 5): una historia que tiene de todo: asesinatos, infidelidades, amor, celos, dinero, locura o drogas en un reparto muy coral con varias líneas argumentales que se juntan al final. Puro género negro en un Londres muy gris y frío. Pero le falta algo. Y no sé qué es.


- El crimen que tú cometiste (Zidrou y Berthet) (Nota 8): de un presunto asesino que vuelve a casa, veintisiete años después, porque su hermano, antes de morir, ha confesado que fue el autor del crimen. Ambientado en la Australia profunda durante los setenta, muy bien contado y mejor dibujado. Un thriller que hay que leer.


- Las calles de arena (Paco Roca) (Nota 5): tremenda rayada que comienza por una hipoteca que hay que firmar y porque al protagonista le gusta Corto Maltés y tomarse una cerveza con un amigo. Inicio excelente. En un barrio que no se acaba nunca lleno de personajes de lo más curioso. Pero luego se va desinflando poco a poco. Me queda la duda de saber si lo hubiera acabado si no fuera de Paco Roca.


- Puertadeluz (Luis Bustos) (Nota 7): porque un futuro post apocalíptico también puede darse aquí en España. Y nada mejor que ambientarlo justo en plena crisis y en una de esas urbanizaciones que se construyeron alrededor de los macrocentros comerciales. Y de protagonista una adolescente rebelde en una familia con problemas reales. Original planteamiento con un final extraño.


- El papiro del César (Ferri + Conrad) (Nota 5): aún tratándose de Astérix, no pongo el clásico Uderzo + Goscinny porque este álbum es ya de la nueva época, sin ninguno de ellos. Simplemente correcto. Lo que no tengo claro es si es por la edad (cuando era pequeño, para mí Astérix era "el cómic") o porque no es tanto como yo pensaba (realmente no veo mucha diferencia con los antiguos cuando los he releído). Pero el rato agradable lo he tenido.


- Rambla arriba, rambla abajo (Carlos Giménez) (Nota 7): muchas historias, de mucha gente, en la Barcelona de finales de los sesenta, pero escrito y dibujado en los ochenta. En unas ramblas que se parece poco a las actuales. Carlos Giménez en estado puro. Otro que nunca me decepciona.


- Serie "El día D" (Duval + Pecau) (Nota 6): coleccion de relatos "What if", es decir, del estilo "Qué hubiera pasado si...". Tocando acontecimientos históricos y viendo sus consecuencias. En modo ficción, no en plan histórico. Y además con desarrollos muy originales. El asesinato de Kennedy 10 años después, los rusos llegando a luna antes que los americanos, París en vez de Berlín como centro de la guerra fría y hasta un Colón descubriendo América, pero financiado por el califato!!! Un poco irregular (son muchos albumes, cada uno de 60 páginas), pero se dejan leer.


- Una judía americana perdida en Israel (Sarah Glidden) (Nota 7): me lo pasó un amigo después de una conversación sobre otro comic acerca de Israel y que no nos gustó a ninguno de los dos, con mucha información pero sin historia. Pero este es distinto. Te va contando mucho de la historia de Israel pero a través del viaje de la autora. Y con un dibujo muy línea clara que me ha gustado. E intentando reflejar las dos posturas sobre el tema palestino. Muy personal.


- El otoño cubano (Hesseldahl y Rehr) (Nota 5): la vida del periodista danés Jan Stage, uno de los que vivió en persona la revolución cubana, la muerte del Che o las protestas contra la guerra de Vietnam. Un retrato de los sesenta que no llega a cuajar del todo. Una pena, porque el tema tiene mucho juego.


- ¿Y ahora qué? (Ortega + Salvi + Zarzo + Delicado) (Nota 6): porque ser mayor no es el fin del mundo. Por lo menos para Pablo, el protagonista, que cuando con 78 años decide empezar a correr, tiene que "enfrentarse" a toda su familia. Todo muy positivo. Sencillo de leer.


- La francesa (Trillo + Túnica) (Nota 8): excelente guión de Carlos Trillo donde, con la excusa de la detención de Mireille, una prostituta francesa, nos retrata en detalle los bajos fondos del Buenos Aires de los años treinta. Asesinatos, intrigas, amor, amistad, corrupción, juegos de poder. Cinismo puro contado con un ritmo perfecto. Y todo ello con un decadente dibujo de Pablo Túnica que refleja muy bien aquel mundo. Hay que leerlo.


- Confesiones de un hombre en pijama (Paco Roca) (Nota 7): la tercera entrega después de Memorias y Andanzas de un hombre en pijama, la serie de Paco Roca en al que se cumple su sueño más deseado: trabajar en pijama. Consigue indignarte (mucha crítica social, se nota que está escrito en mitad de la época de recortes), que sonrías (cuando habla de sus problemas con las máquinas o narra su entrevista en el banco) o que te enternezcas (esos amores de juventud...). Este Paco Roca nunca decepciona.


- Tsunami (Piatzszek + Pendanx) (Nota 8): un francés que va a Indonesia a buscar a su hermana mayor que desapareció durante el tsunami. Mucho tiempo después. Con un excelente dibujo, los diálogos indispensables y un ritmo calmado. Lo encontré de casualidad y me ha gustado mucho.


- Sudor de sol (Harriet y Mata) (Nota 6): aventuras en la América española de principios del siglo XVI. Los cinco tomos con la historia completa. Un choque de culturas con mucho oro, conquistadores, indios, codicia, misioneros, calor, enfermedades y saqueos, y entre todo ello, una historia de amor, la de Marcos y Orocomay. Se deja leer.


- Pyongyang (Guy Delisle) (Nota 7): ya el dibujo me empezó a agobiar, con negro y muchísimo gris con distintas tonalidades. Un animador de dibujos que se va a trabajar a la capital norcoreana (cosas de la globalización!!!). Con su traductor y su guía que le acompañan a todas partes. Y va contándonos como es la sociedad más cerrada del mundo. Cosas que a nosotros nos parecen incomprensibles, pero sobre todo, miedo y silencio. Me ha dejado un poco mal. Pero te hace pensar sobre el valor de lo que tenemos.


- El faro (Paco Roca) (Nota 6): solo tiene dos personajes: un joven soldado republicano que escapando de la derrota, acaba en un faro. Y el farero, un soñador que se resiste a abandonar el lugar donde siempre ha vivido. Dos "derrotados", que no perdedores, que se hacen amigos. Pero en la vida real las cosas no dudan para siempre. Se me ha hecho corto. Creo que podía haber dado para una historia más completa y larga.


- El mediador. Una historia de Sarajevo (Joe Sacco) (Nota 6): siempre me han gustado las historias de Joe Sacco. Pero tengo que reconocer que ésta, la de un mediador al que conoció en Sarajevo durante la guerra en Bosnia, no es la mejor. Irregular, técnicamente buena, pero le falta alma. Se deja leer, pero por debajo de mis siempre altas expectativas con respecto a cualquier cosa que hace este señor.


- Jamás tendré 20 años (Jaime Martín) (Nota 7): la historia de Isabel y Jaime (los abuelos del autor, Jaime Martín), desde su juventud en Melilla en los días previos a la guerra civil hasta el Hospitalet de los años setenta. Me he quedado con la sensación de haber leído/escuchado previamente la historia. Pero reconozco que me ha enganchado. Dibujo línea clara, del tipo que me gusta a mí.


- El fantasma de Gaudí (El Torres + Jesús Alonso) (Nota 4): a ver como explico yo lo de este comic. Es como una novela de Dan Brown, pero ambientada en Barcelona. Y para encontrar al asesino, pues la va recorriendo a la vez que visita las obras del arquitecto catalán. Un dibujo correcto, refleja bien el trabajo de Gaudí. Pero la historia es bastante corrientita, con su fantasma y todo.


- Deportado 4443 (Carlos Hernández + Ioannes Ensis) (Nota 7): la historia de Antonio Hernández, un español del bando republicano que acabó en el campo de Mauthausen, contada por su sobrino. Usando como base los tuits que escribió en 2015, narra el día a día del campo como si fuera su tío. Porque en los campos nazis no solo había judíos: también había gitanos, comunistas, niños, homosexuales, rusos o españoles (y otras muchas nacionalidades). Dibujo duro, sencillo, blanco y negro. Triste, muestra como hay veces en las que los humanos somos capaces de lo peor.


- Guía gatuna (José Fonollosa) (Nota 4): la primera vez que lo vi me llamó la atención por dos cosas: porque esta en blanco, negro y un azul muy "MrWonderful" y por el subtítulo "Normas para la convivencia con humanos". Pero luego, al leerme las 100 tiras, no me ha acabado de convencer. No sé si por el formato, porque los gatos no es que me gusten mucho o porque lo leí después de "El último asalto".


- El último asalto (Tardi) (Nota 7): con un dibujo que en teoría es en color pero que parece blanco y negro, Tardi nos muestra la verdad de la guerra. Sucia, injusta, fea. Ambientada en las trincheras de la primera guerra mundial, nos cuenta las vivencias de Mathurin, un camillero francés. Aunque perfectamente podía haber sido británico, ruso, austriaco o alemán. Y viene con un DVD que incluye material adicional, que la verdad no miré. Duro.


- Let's Pacheco (Carmen y Laura Pacheco) (Nota 7): las hermanas Pacheco nos cuentan una semana en la vida de su familia durante las vacaciones de Navidad. Y todo eso mientras se comen un jamón. Y no hay más. Pero muy bien hecho.


- Piratas (Terpant y Bonifay) (Nota 6): pues eso, que me he leído de una sentada (bendito fin de semana) todos los álbumes y me ha gustado. Historia de piratas en el Caribe, con españoles, franceses o ingleses, abordajes, indios, ron y todo eso. Nada nuevo pero tampoco nada malo, todo muy correcto. Entretiene.


- Miércoles (Juan Berrio) (Nota 7): la historia de un edificio cualquiera, en un barrio cualquiera de una ciudad cualquiera con unos personajes que no paran de cruzarse durante un miércoles cualquiera. Original y curioso relato, circular, cotidiano, con un dibujo muy sencillo pero que funciona. Resumiendo, no se trata de un comic cualquiera.


- Hombre (José Ortiz y Antonio Segura) (Nota 8): la primera vez que leí algo de Hombre fue hace mucho tiempo, en mi época de colegio mayor, creo que en la revista Cimoc. Pero siempre historias aisladas, no como ahora, en un tomo de más de 500 páginas que incluye toda la serie. Cuando lo vi en la biblioteca no pude resistir la tentación de cogerlo. Para los más jóvenes, es como una versión previa de The Walking Dead (el comic es anterior a la serie, que quede claro, y se sigue publicando), pero en una versión más dura y políticamente incorrecta. Personalmente pienso que Rick duraría un par de días en el mundo de Hombre, y eso que no hay zombies. Y el dibujo de Ortiz, para quitarse el sombrero.


- ¿Cuánta tierra necesita un hombre? (Martin Veyron) (Nota 6): ambientada en la Rusia zarista, en las comunas agrícolas donde quién mandaba realmente eran los boyardos. Adaptación del relato de Leon Tolstoi al mundo del comic. Nos cuenta la historia de un hombre y su ambición por tener más y más tierras, lo que le lleva a dejar de lado a su familia, enfrentarse a sus vecinos y embarcarse en un viaje con un final no esperado pero original.


- El ala rota (Antonio Altarriba y Kim) (Nota 8): solo al acabar el cómic, al leer las últimas paginas, me enteré de que esta obra es la historia de su madre, como "El arte de volar" era la de su padre. Mucha más orientada a la parte humana y menos a la social que la anterior. Nos muestra una España del siglo XX pocas veces recordada. Desde la perspectiva de una mujer y con un punto de vista más "casero". Uno de los cómics españoles que no hay que dejar de leer.


- Historias del barrio (Beltrán y Seguí) (Nota 7): colección de historias sobre la Palma de los 80, contadas por un adolescente que vive en el barrio chino. Drogas, delincuencia, todo muy sórdido, pero se transmite que es algo vivido, real. Bien narrado, autobiográfico, son los recuerdos de Gabi Beltrán. Seguí es el dibujante. Me ha llamado mucho la atención esa letra de máquina de escribir antigua que usan para todo lo que no son los diálogos de los personajes. Me recuerdan a los antiguos Astérix.


- El gran duque (Yann y Huagault) (Nota 5): ambientada en el frente ruso durante la segunda guerra mundial, es la historia de dos pilotos (un alemán y una rusa, eso sí, el primero no es nazi y la segunda no es comunista, son los buenos, claro), sus batallas y su relación. Y mientras se desarrolla la trama, no muy original, aparecen una serie de personajes a cual menos creíble: el jefe nazi pero que luego no lo es, la fanática comisaria política, el trepa, los amores previos y hasta un medio judío en la Luftwaffe (???). Lo dicho, un guión del montón para una obra que no suspende porque tiene un dibujo quizás un poco frío, pero de calidad.


- Dimas (Andreu Martín y Sagar Forniés) (Nota 6): Dimas, un ladrón que se ha retirado e intenta recomponer su vida, se ve involucrado por casualidad en un entramado donde hay de todo: desde policías corruptos a empresarios sin escrúpulos, pasando por bebés recién nacidos. Y todos (salvo el bebé, claro) se dedican a hacerle la vida imposible al pobre de Dimas, porque piensan que tiene una información muy valiosa. Pero no saben que meterse con Dimas es como hacerlo con Rambo: muy peligroso. Entretenido, mucha violencia gratuita para mi gusto, pero se deja leer.


- El angel de la retirada (Serguei Dounovetz) (Nota 6): Victoria, nieta de republicanos españoles que salieron hacia Francia después de la derrota en la guerra civil, nos cuenta, a veces soñando y otras en la realidad, la historia de "la retirada" y de la colonia española de Beziers. Artista invitado: Manu Chao. Historia sencilla y cercana, con dibujo de Paco Roca. De fácil lectura, la idea es original, pero creo que no se aprovecha bien y al final la historia no acaba de cuadrar en su conjunto.


- Lobezno (Orígenes y El viejo Logan) (Nota 8): de la colección de Panini Marvel Heroes. Juntos pero totalmente distintos. Guiones de Paul Jenkins y Mark Millar respectivamente. Del pasado de Lobezno a su "futuro"??? Dos dibujos muy distintos, pero me quedo con el de Steve McNiven (El viejo Logan). Lobezno sigue siendo mi personaje Marvel favorito.


Gorazde: Zona protegida (Joe Sacco) (Nota 8): descubrí a Joe Sacco hace años, por Palestina y por Notas al pie de Gaza. Me hizo entender desde un punto de visto distinto, muy suyo, todo aquel conflicto. Y desde entonces me gustó y mucho la forma que tiene este periodista de contar historias, centrándose más en las personas que en los acontecimientos. Y este comic me ha permitido descubrir y comprender otro conflicto (la guerra de Bosnia) al que no le presté la debida atención cuando sucedió (fueron tantos años de guerra en Yugoslavia con noticias diarias, que al final te acabas liando, y sobre todo, saturando). Después de leer esta historia, recomiendo la lectura de cualquiera de las obras de Joe Sacco, un clásico ya en el mundo del comic.


- Nuevos Vengadores (Brian Michael Bendis) (Nota 8): serie de muchos tomos (he leído hasta el 13) de Marvel Deluxe editados por Panini. Esta vez no me ha pillado de sorpresa, empiezo a entender el "nuevo" (que para mí significa 30 años después!!!) universo Marvel. Muchas historias, que gracias a mi lectura previa de Capitán América van encajando, y que van desde la creación del nuevo grupo al Asedio de Asgard, pasando por Civil War, la invasión secreta de los skrull o el reinado oscuro de Osborn. Muy buen guión el de Brian Michael Bendis. Y si puedes, leételo de una sentada. La pregunta es qué historia Marvel será la siguiente con la que me ponga.


- Martha Jane Cannary (Matthieu Blanchin + Christian Perrissin) (Nota 7): extenso comic, muchas veces serio, salpicado de pequeños toques de humor, pero siempre muy realista, acerca de Calamity Jane, unos de los míticos personajes del Oeste americano. Ambientado en la segunda mitad del siglo XIX, va desgranando la vida, dura, compleja y variada de Martha Jane, a la vez que nos cuenta la historia de Estados Unidos durante ese periodo. Aparecen personajes famosos y reales como Wild Bill Hickok o Seth Bullock. Que por cierto, coincidieron en Deadwood durante un tiempo.


Conan La leyenda (Varios) (Nota 7): serie de 12 tomos de Marvel Deluxe editados por Panini. Hacía muchísimos años que no leía nada de este personaje (La espada salvaje de Conan), con una temática (espadas, brujería y todo eso) que en principio no me tendría que llamar mucho la atención, pero que reconozco que me ha enganchado. Basados en las historias de Robert E. Howard, con varios dibujantes (incluido Richard Corben), me han gustado más los episodios iniciales. Son historias relacionadas y en orden cronológico. Para leer de una vez. Adictivo


- El arte de volar (Antonio Altarriba + Kim) (Nota 9): Antonio nos cuenta, con un excelente dibujo de Kim, la historia real de su padre, desde su infancia en los años 20-30, pasando por la Guerra Civil y el exilio hasta su vuelta y muerte en la España del siglo XXI. Muy realista y dura, pero a la vez entrañable y cariñosa. Muy centrada en las personas, pero también reflejando de forma excelente nuestra reciente historia. Muy pero que muy recomendable. Ya me he apuntado volver a leerla y no dejando pasar mucho tiempo.


Los ignorantes (Etienne Davodeau) (Nota 7): la historia es muy curiosa. Un viticultor y un escritor y dibujante de comics deciden compartir sus mundos y explicar sus cosas el uno al otro. Así que nos enteramos de cómo se podan las vides o se fabrican las barricas, y también de qué hace un editor de comics o de cómo se eligen las colores de las planchas. Todo desde dentro. Un viaje de iniciación compartida en un formato distinto. Porque no todo son superhéroes en mallas o manga.


Capitán América (Ed Brubaker) (Nota 8): cogí el primer volumen simplemente porque la colección era grande (13 tomos editados por Panini) y me apetecía una historia larga. El Capitán América era un personaje que me parecía muy plano y simple. Pero lo de Ed Brubaker es algo completamente distinto. Excelente guión. Son las historias sobre el soldado de invierno, Civil War, la muerte de Steve Rogers y la aparición del nuevo "Capi". Me ha hecho cambiar definitivamente la idea que había tenido hasta ahora sobre el universo Marvel. Recomiendo leerlo de un tirón. Engancha.


Metropolis + Adolf (Osama Tezuka) (Nota 8): dos comics muy distintos pero del mismo autor. Los pongo juntos porque han sido los primeros manga que he leído. Metropolis me gustó, y Adolf todavía más. Nada que ver con la idea previa que tenía del comic japonés.


El escultor (Scott McCloud) (Nota 7): descubrí este comic por casualidad, en la biblioteca. Me gustó la portada y como era bastante grueso, lo cogí. Y me ha gustado. La historia de un escultor cuya carrera y vida no acaban de despegar, y que hace un pacto con la muerte para poder esculpir las obras siempre que siempre había imaginado pero que no era capaz de hacer. Pero todo tiene un precio. Y ya no digo más que lo cuento todo. Me ha encantado el dibujo y he pasado un buen rato con la historia.


Yo soy Legión (Fabien Nury + John Cassaday) (Nota 6): correcta historia de nazis y vampiros (aunque en una mezcla un poco rara!!!) con un muy buen dibujo de Cassaday. Aunque he tenido la sensación de que se intentan contar demasiadas historias a la vez y uno se lía un poco. Tres álbumes que se dejan leer. Tiene versión en cine.


- La guerra civil española (Paul Preston + Jose Pablo Garcia) (Nota 6): la verdad es que no sabía donde colocar este mix histórico de comic (Jose Pablo García) y libro (Paul Preston). Bien estructurado, hay que reconocer que Preston cumple, como el gran hispanista que es. Lo que no me convence tanto son las ilustraciones de García. Aún así, un buen recurso para iniciarse en el siempre interesante y polémico tema de nuestra guerra civil.


- La casa (Paco Roca) (Nota 9): la historia de la relación de un padre con sus hijos (y con la vida en general), contada usando como excusa esa segunda residencia que tantas familias españolas se construyeron durante años. Como en Arrugas, Paco Roca nos habla de la figura del padre. Y vuelve a hacerlo muy bien. Una historia de las que llegan.


Namor: En las profundidades (Peter Milligan + Esad Ribic) (Nota 8): relato muy distinto a los de Marvel que yo conocía (hace muchos años!!!). Lúgubre. Claustrofóbico. Muy logrado. Y no solo el guión. El dibujo de Ribic ayuda y mucho.


El atentado (Dauvillier + Chapron) (Nota 7): en el Israel de nuestros días, un cirujano palestino pero con nacionalidad israelí y plenamente integrado en la sociedad judía, descubre que su mujer se ha inmolado matando a 19 personas en un atentado. Y empieza una búsqueda para intentar comprender lo sucedido. Duro, muy duro. Retrato de una sociedad totalmente dividida.


- Tony Corso (Berlion) (Nota 6): los siete primeros albumes de la serie, y que yo sepa de momento no hay más. Peripecias de un detective italiano (siempre con sus características camisas de flores!!!) afincado en Saint-Tropez. No es que aporte nada nuevo al género, pero las historias están bien construidas. Se deja leer. Buen dibujo.


- Equipo rojo (Garth Ennis) (Nota 7): historia sobre un equipo de policías de élite americanos, que, ante la imposibilidad de atrapar a uno de los "malos", decide asesinarlo. Pero eso es solo el comienzo. Duro. Muy buen guión y un excelente dibujo de Craig Cermak. Empecé a leerlo casi por casualidad (andaba buscando los últimos números de The Boys) pero me ha gustado. Este Garth Ennis es un crack!!!


Conquistador (Jean Dufaux) (Nota 6): del autor de Murena o Jessica Blandy, en esta ocasión la historia se ambienta en la época de los primeros contactos de Cortés con el imperio azteca. Pero aunque aparezcan muchos personajes históricos, se trata más de un comic de aventuras con elementos de brujería que de uno histórico. Entretenido pero no excesivamente original, con buen dibujo de Philippe Xavier.


He visto ballenas (Javier de Isusi) (Nota 7): dura historia sobre el terrorismo de ETA en los noventa y su impacto en el día de hoy. Como comic me gusta, pero desde un punto de vista histórico cae en el "revisionismo" sobre el tema que se lleva estos últimos años.

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